Me parece una de las propuestas más interesantes y directas de activismo digital o ciber-activismo (que no hacktivismo) de las que se han propuesto últimamente. Por supuesto, esta forma de política, en principio totalmente legal y legítima hasta donde llega mi poco conocimiento en este tema, tendrá que lidiar con enemigos desde antes incluso de su fundación.
Por un lado, estarán aquellos que piensen que un partido sin una filosofía o una afiliación determinada no puede hacer política de manera seria. Por otro lado tendremos a aquellos que ya han votado a sus respectivos partidos y que podrán volver a influir gracias al partido de internet, por lo que habrán intervenido en dos ocasiones en la toma de decisión política... ¿Esto podría ser ético/sano en una democracia? ¿Sí? ¿No? Son muchas las dudas que surgen, aunque eso no le quita interés y fuerza a la idea.
Ahora, ¿Cuánta gente dejará de votar a su partido o a sus intereses regionales para votar a un partido de internet en el que luego todos podrán opinar (incluso en contra de sus propios intereses personales)? Recordemos que en el congreso no se votan sólo cuestiones relacionadas con tecnología y libertades, como parece que es el perfil de aquellos que votarán al partido de internet (desde mi punto de vista, al menos). ¿Dejarías de votar a tu partido por votar al partido de internet? Tiene que darse una situación que despierte a la masa crítica mínima como para que esta elección pueda tener el peso suficiente como para cambiar la elección de muchos ciudadanos.
Una vez creado y suponiendo que llegase a tener votos suficientes como para tener representación política, ¿Cómo usarán el resto de partidos y sus afiliados esos escaños? Seguramente los afiliados harán campañas de votación en este partido y es posible que al final se convierta, si no se controla de alguan manera, en un arma más de propaganda y desviación de la atención de la agenda general. ¿Se contemplaría en algún momento que sólo votasen en el partido de internet aquellos que estuviesen afiliados al partido (suponiéndese que no tuviesen otras afiliaciones)?
De todas maneras, me encanta este tipo de experimentos y me gustaría, realmente que saliese adelante. Pero ¿está la sociedad y la política actual lista para esto? ¿Matarán la idea antes de que se haga realidad? Desde aquí sólo puedo decir...
¡VIVA EL CIBER-ACTIVISMO!
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