miércoles, 30 de mayo de 2012

¿Cómo nos hicimos (casi) monógamos?

Ayer se publicó un artículo muy interesante en PNAS que está haciendo bastante ruido, incluso en prensa no especializada. El artiulo en sí es "Human origins and the transition from promiscuity to pair-bonding" ("Los orígenes humanos y la transición de la promiscuidad a los lazos de pareja"). Este artículo trata de probar a través de un modelo matemático cual de los posibles escenarios o fuerzas evolutivas han podido hacer posible la transición de un comportamiento sexual similar al de chimpancés (promiscuo) a uno humano (monógamo). Pero vayamos por partes...

El ser humano es muy diferente del resto de primates vivos hoy en día (Gorilas, Chimpancés, Bonobos y Orangutanes). Entre las más significativas están:
  • Bipedismo (andar sobre dos pies)
  • Un cerebro muy desarrollado (en especial el lóbulo frontal)
  • Un gran cerebro implica un tiempo de maduración mayor, pero la cadera que permite andar de forma bípeda impide que los bebés tengan un tamaño de cabeza excesivo. Por ello la última etapa de maduración ocurre fuera del útero durante el primer año de vida, lo que hace que los bebés humanos sean especialmente vulnerables
  • Un bebé muy vulnerable implica que la madre tiene que cuidar de él y tiene que dedicar tiempo que antes utilizaba para conseguir alimentos a su cuidado. Esto hace necesaria la implicación de la figura paterna en el cuidado de la madre y el bebé, cosa que no pasa en el resto de primates
  • El ser humano es básicamente monógamo (aunque moderadamente promiscuo), mientras que los gorilas macho tienen harenes y los chimpancés son promiscuos aunque sólo pueden aparearse con las hembras los machos dominantes
  •  El ser humano es el único primate que ha perdido los colmillos superiores, esenciales para las competiciones entre machos por el dominio y luchas por estatus
  • El ser humano es el único primate en el que la hembra muestra lo que en otros primates serían signos de ovulación de forma constante (pechos hinchados) y por otro lado, suprime otros signos de ovulación (ovulación escondida o críptica) como coloración de la piel, aumento del volumen de la vulva, etc. 
¿Cómo llegó el ser humano a ser tan "especial"?

¿Cómo hemos pasado de "algo parecido a un chimpancé" en el que los machos dominantes se reproducían promiscuamente con las hembras y se peleaban a mordiscos sin importarles lo más mínimo sus propios hijos a "padres de familia ejemplares" y "esposas devotas de sus maridos"? Para empezar, esto no es exactamente así...

Para empezar, tenemos que pensar algo muy importante: nos separamos de nuestro primo más cercano (el chimpancé) hace unos 6.000.000 años (6Mda). Eso no significa que evolucionásemos a partir del chimpancé hace 6Mda, sino que el último ancestro común vivió hace 6Mda, momento a partir del cual, tanto el hombre como el chimpancé (junto con el bonobo) siguieron caminos evolutivos distintos. Imaginaos ahora que si el ser humano ha tenido 6Mda para convertirse en lo que somos ahora desde ese "ancestro común", nuestros primos han tenido el mismo tiempo evolutivo para convertirse en lo que hoy son. Esto nos da una pista de cuánto puede parecerse el último ancestro común que tenemos con el chimpancé al  propio chimpancé. Así pues, pensar que evolucionamos a partir de algo muy parecido al chimpancé es como pensar que el chimpancé ha evolucionado de algo muy parecido al ser humano

Sin embargo, hay una manera más próxima de averiguar cómo era ese último ancestro común, y es estudiar el eslabón conocido más próximo a ese ancestro común. Se llama Ardipithecus ramidus y hay un artículo muy interesante que sirve de cita para el primero que hemos nombrado y que habla de cómo era este ancestro de los humanos y cómo pudo haber sido ese ancestro común.
El tatara-tatara-tatara-abuelo Ardi. Fuente: cienciaes.com 

El Ardipithecus (en adelante, Ardi), vivió hace unos 5,6-4,4Mda, antes que Lucy que vivió hace unos 4Mda. Sin embago, ya tenía algunas de las características más importantes, como por ejemplo: 
  • Bipedalismo, aunque con unos pies aún adaptados a la vida arbórea
  • Unos caninos muy reducidos, lo que da muestras de una competición entre machos muy reducida
  • Una diferencia de tamaño entre machos y hembras muy pequeña, lo que es un signo de baja poligamia
Lo que propone este segundo artículo es que el último ancestro común con los chimpancés se parecería más a Ardi que a un chimpancé actual y que el desarrollo de grandes caninos, alta promiscuidad y competencia entre machos puede haber sido una evolución de la rama de los chimpancés, diferente a la humana. 

A su vez, este artículo propone que la falta de caninos desarrollados muestra a machos con una baja competencia entre sí. Esto es muy importante ya que si los machos destinan menos tiempo a la competición entre ellos, pueden dedicarlo a otras cosas, como a la recolección que hace posible el bipedismo por tierra con las manos libres para transportar alimentos.

La gracia del nuevo artículo es que parte de un escenario inicial muy similar a Ardi, y demuestra con un modelo matemático (con las simplificaciones y limitaciones que todo modelo tiene) como el intercambio de comida por sexo entre machos y hembras que propone el segundo artículo ha podido evolucionar en un escenario de hembras (mayoritariamente) fieles y machos no dominantes que destinan sus esfuerzos a la búsqueda de recursos para su hembra y no a la competición física con otros machos. Como vemos, la antepasada común era un poco puta.

¡¿Has dicho puta?!

Sí, he dicho "puta". Este tipo de "prostitución", o intercambio de recursos a cambio de sexo, se da también en chimpancés de manera espontánea y parece ser que fue el primer paso de la promiscuidad a la monogamia. Algunos machos de bajo estatus conseguirían sexo a cambio de comida y esto aumentaría no sólo su éxito reproductivo, sino también el de la propia hembra. Aquí hay que darse cuenta de que para que un macho de bajo estatus tenga sexo con una hembra, uno de mayor estatus debe dejarle, o debe haber una baja agresividad entre ellos. Recordad aquí los colmillos poco desarrollados de Ardi. 

Sin embargo, esto sólo no llega a un equilibrio estable, según el modelo del artículo. Para conseguirlo las hembras deben ser fieles al macho que les da alimento, de forma que este tenga motivos suficientes para continuar dando alimento y más adelante, cuide de los hijos de esta al poder asegurar (al menos en buena medida) que son suyos. Estamos ante en el comienzo de la inversión parental masculina.

Así que pasamos de un grupo de machos dominantes que se llevaban todo el pastel reproductivo a unos machos no dominantes que pagaban por sexo a hembras. Estas hembras desarrollaron una fidelidad hacia estos machos, que consiguieron un éxito reproductivo imposible en otro escenario, por lo que pasaron a convertirse en proveedores en lugar de luchadores. El bipedalismo le permitiría a los machos transportar alimento suficiente con las manos libres para su propio abastecimiento y para el de la hembra. Esto es posible con las características que describe el segundo artículo de Ardi, lo que lo hace una hipótesis, en principio, bastante plausible.

Un segundo punto importante y del que no hablan en ninguna de las noticias ni notas de prensa, es que en este modelo las hembras no llegan a ser totalmente fieles, sino que mantienen un equilibrio entre fidelidad al macho para que siga proveyendo de recursos, pero no lo suficiente como para renunciar a los genes de mejor calidad de los machos dominantes. Esto coincide con los cambios de preferencia en la mujeres humanas según el estado del ciclo menstrual en el que se encuentran. En los días de ovulación las mujeres se sienten más atraídas por hombres con mayores niveles de testosterona (mejor fenotipo y por tanto, mejores genes) y con diferente complejo mayor de histocompatibilidad (mejor genotipo de la descendencia), lo que no necesariamente tiene por qué coincidir siempre con su pareja. 

Este modelo también es compatible con las diferencias encontradas entre sexos sobre el tipo de infidelidad que genera más celos. Las mujeres reaccionan más ante infidelidades emocionales, ya que pueden hacer que el hombre destine recursos a otra mujer, y los hombres ante infidelidades sexuales, lo que tendría un riesgo de que el hijo de la mujer no sea suyo.

También es compatible con la estrategia reproductiva de los hombres humanos, en los que los hombres de mayor estatus suelen tener una estrategia reproductiva poligámica (no tenemos más que pensar en la vida sexual de Berlusconi, Strauss-Kahn, Hugh Hefner o Charlie Sheen) y los hombres de menos estatus apuesten por una vida sexual monógama.

Hugh Hefner. Fuente: El Economista

Lo único que puedo encontrar chirriante es quizás que utilice como escenario de partida un modelo reproductivo muy similar al del chimpancé, quizás demasiado similar... No se tienen pruebas suficientes de que el último ancestro común se comportase sexualmente de esa manera, y por lo tanto para tomar ese escenario como partida. ¿Cambiaría el resultado si se escoge uno diferente?

Sería interesante también ver cómo encaja este modelo de evolución de la monogamia con diferentes formas de cortejo humano en los que el hombre invita a la mujer a comer/cenar/beber o hace regalos (flores/anillos de diamantes/bombones...). ¿Son estas formas de cortejo universales y con origen en ese cambio de emparejamiento sexual? 

Otra pregunta que me surge... ¿es la prostitución un vestigio o un subproducto evolutivo de los primeros intercambios de recursos por sexo?


ResearchBlogging.org
Gavrilets, S. (2012). Human origins and the transition from promiscuity to pair-bonding Proceedings of the National Academy of Sciences DOI: 10.1073/pnas.1200717109

Lovejoy, C. (2009). Reexamining Human Origins in Light of Ardipithecus ramidus Science, 326 (5949), 74-74 DOI: 10.1126/science.1175834

domingo, 27 de mayo de 2012

Exposición Magia o Ciencia en Zaragoza


Si pasáis por la Plaza del Pilar de Zaragoza, no podéis perderos la exposición "Ilusionismo ¿Magia o Ciencia?" que hay hasta el 19 de Junio. 

Dentro podréis jugar (literalmente) con muchas de las ilusiones que crea nuestro cerebro y disfrutar de las explicaciones de por qué se crean todas ellas. Aunque está orientado a un público muy general, e incluso niños, a los que os guste la neurociencia también disfrutaréis con imágenes fMRI del cerebro en acción, explicación de los diferentes sesgos cognitivos que explotan las ilusiones y muchos ejemplos para divertirse. 

También me gustó que no sólo muestra ilusiones ópticas (quizás las más conocidas), sino que también juega con el resto de sentidos, como el tacto, el oído, el olfato... ¡y varios a la vez!. 

Lo dicho, si podéis acercaos a ver la exposición, eso sí, id con tiempo suficiente porque hay mucho que ver.

jueves, 24 de mayo de 2012

¿Es la cara del anti-héroe más ancha que larga?

Ayer se publicó un artículo titulado "Face Structure Predicts Cooperation: Men With Wider Faces Are More Generous to Their In-Group When Out-Group Competition Is Salient " (La estructura facial predice la cooperación: Los hombres con caras más anchas con más anchas son más generosos con los miembros de su grupo cuando la competición con otros grupos es evidente).

En el artículo buscan una correlación entre la masculinidad del rostro, en este caso medido por la anchura del mismo (distancia entre los huesos cigomáticos y la distancia entre el labio superior y el arco supraorbital) y cuánto se está dispuesto sacrificar por el grupo cuando hay un enfrentamiento con otro grupo rival. ¿Cómo es la cara de un héroe que se sacrifica por el grupo en un enfrentamiento con un grupo enemigo?

Además, lo gracioso de este artículo es que no buscan a Superman, un tipo amable, buena persona con todo el mundo... nada de eso. Buscan la cara del anti-héroe. Ese tipo que no hace nada por los demás, que es antisocial, egoísta y agresivo, pero que cuando hay que sacrificarse el tío suelta el "¡Sálvate tú Johny, y dile a Mary que la quiero!". Este comportamiento está asociado más a hombres que a mujeres y dentro de los hombres a aquellos con caracteres más masculinos.

Un anti-heroe de nuestra infancia. Fuente: Desmotivaciones.org

Como vimos en otro artículo, tanto el hueso cigomático como el arco supraorbital crecen de manera proporcional a la testosterona que se recibe en la pubertad en los hombres (aunque existen variaciones según la etnia, por ejemplo, los aborígenes australianos y los europeos tenemos en arco supraorbital más pronunciado que otras etnias).

Aborigen australiano. Fuente Wikipedia

Sin embargo, si querían medir la masculinidad de los individuos, es decir, su nivel de testosterona, me pregunto por qué no han optado por medidas más directas, como medir la testosterona directamente o el ratio de los dedos indice-corazón. Me hubiesen parecido medidas mucho menos dependientes de fenotipos específicos y poblaciones como puede ser la forma craneal, o los huesos faciales.

Aún así, sí que se encontró una relación, y parece que las caras más masculinas tenían una capacidad de sacrificio por el grupo mayor en contextos de enfrentamiento entre grupos.

Igual sería interesante explorar qué hace que ese comportamiento se manifieste. ¿Es la testosterona? ¿Debería controlarse también en este experimento el efecto etnocentrista de la oxitocina para estar seguros de que es debido a la testosterona? ¿Y si la testosterona les hiciese más sensibles a la oxitocina y a sus efectos etnocentristas?

Seguro que este artículo da para bastantes más en un futuro, pero de momento me gustaría ver uno que replicase esta hipótesis con marcadores más fiables.


ResearchBlogging.org
M. Stirrat,D. I. Perrett (2012). Face Structure Predicts Cooperation: Men With Wider Faces Are More Generous to Their In-Group When Out-Group Competition Is Salient Psychological Science : 10.1177/0956797611435133


De Dreu, C., Greer, L., Van Kleef, G., Shalvi, S., & Handgraaf, M. (2011). Oxytocin promotes human ethnocentrism Proceedings of the National Academy of Sciences, 108 (4), 1262-1266 DOI: 10.1073/pnas.1015316108

Manning, J., Scutt, D., Wilson, J., & Lewis-Jones, D. (1998). The ratio of 2nd to 4th digit length: a predictor of sperm numbers and concentrations of testosterone, luteinizing hormone and oestrogen Human Reproduction, 13 (11), 3000-3004 DOI: 10.1093/humrep/13.11.3000

domingo, 20 de mayo de 2012

Obesidad y evolución:(Gor)2

En el artículo anterior trataba de explicar como en la sociedad actual, el acceso a una gran cantidad de azucares y grasas en la dieta han hecho posible que en las sociedades industrializadas tengamos unas tasas de obesidad y diabetes nunca vistas en la historia de la humanidad.

Hace unas semanas se publicó un artículo en el que identificaban una variante en la genética humana que apareció hace aprox. 300.000 años que hace que el ser humano produzca grandes cantidades de ácidos grasos omega-3 y omega-6. ¿Por qué es esto importante? Porque el cerebro está hecho de este material, son los ladrillos del cerebro, hasta tal punto que el tipo de dieta que se siga modifica el tipo de ácidos grasos que predominan en el cerebro modificando incluso su funcionamiento (al menos en ratones).

Esto es muy bueno cuando vivimos en sociedades en las que tenemos que cazar para conseguir el alimento (actividad que no siempre sale bien) y tenemos un gran cerebro que alimentar con ácidos grasos, pero el propio autor del estudio comenta que este es un buen ejemplo de "gen derrochador", que aporta ventajas en escenarios de escasez pero que resulta perjudicial cuando hay una abundancia de alimentos.

Sobre la carne, es una historia muy larga. ¿Cuándo comenzaron los antepasados del ser humano moderno a comer carne y cómo? Parece ser que los primeros antepasados del ser humano comenzaron a comer carne como carroñeros, aprovechando animales muertos que dejaban los depredadores como una fuente adicional de calorías. Parece que el primero fue el Homo Ergaster:


El tipo de herramientas de piedra que aparecen en esta época parece que avalan esta hipótesis, ya que los bifaces de este periodo son herramientas para cortar y despedezar (indispensables para cortar y atravesar la piel de animales salvajes para un primate que no tiene ni garras ni dientes de carnívoro), no para cazar como aparecen más adelante con puntas de lanza y otras armas.

Pero como decía uno de los comentarios, ¿Por qué nos gusta más la carne cocinada que la carne cruda? Aquí es donde tenemos que hablar del uso del fuego. Según un artículo publicado recientemente, una cueva en Sudáfrica aporta pruebas del uso del fuego de hasta hace 1 millón de años y se piensa que la especie que hizo uso de ese fuego en concreto es un Homo Erectus. Si comparamos 1.000.000 de años con los 200.000 en el que aparece el primer humano anatómicamente moderno, el fuego para cocinar parece haber estado en el mundo 5 veces más que el propio Homo Sapiens.

¿Pero qué aporta el fuego? 

En primer lugar, cocinar la carne permite sacar parte del proceso de digestión fuera del cuerpo. El fuego hace que la comida sea más calórica y constituye una gran ventaja alimenticia. Para que os hagáis una idea, mirad este gráfico:


En los cuadrados podéis ver como aumenta el índice de masa corporal aumenta con la cantidad de alimentos cocinados y las mujeres en edad fértil no embarazadas (es decir, que deberían tener la regla) que presentan ausencia de regla (amenorrea) aumenta con los alimentos no cocinados en la dieta.

Además, cocinar la carne daría una ventaja adicional, que es la eliminación de parásitos que acortan la cantidad y calidad de los años de vida, especialmente si vives en el pleistoceno. Si tenéis o habéis tenido una mujer embarazada en casa sabéis la psicosis que sufren con el miedo a la toxoplasmosis (miedo real, ya que puede provocar malformaciones importantes en el feto) o el peligro creciente que existe con el anisakis del pescado. Ambos parásitos se destruyen cocinando los alimentos, lo que constituye también una ventaja importantísima desde el punto de vista evolutivo, porque consigue detener a la Reina Roja, esa lucha armamentística interminable que existe entre parásito y huesped en todas las especies.

También surgía la pregunta:
¿Qué hubiese pasado si durante la evolución hubiese aparecido un árbol de chocolatinas? ¿Crees que nos habrían dejado de gustar porque la gente engordaba? ¿O habría sido una ventaja para una sociedad que habría tenido una fuente de alimento fácil?
El "árbol de las chocolatinas" existe, y no estoy hablando del cacao. Una imagen vale más que mil palabras:

Fuente de la imagen: advancebariatric.com

El alcohol tiene un alto valor calórico, es fácil de conseguir y además actúa sobre los centros del placer del cerebro de forma aún más potente de como lo hace comer grasa. Es nuestro "árbol de chocolatinas" del presente. ¿Nos ha dejado de gustar el alcohol? ¿Es una ventaja para las sociedades en las que se consume de forma masiva? El consumo del alcohol y el alcoholismo es otro subproducto evolutivo igual que la diabetes y la obesidad.

Otro comentario interesante fue el siguiente:

Respecto a los hábitos alimenticios, me parece que se podrían escribir varias tesis doctorales, pero si que el poder adquisitivo y el precio de distintos tipos de alimentos tiene un gran peso.
Por ejemplo en California, vi que familias enteras de obesos iban a garitos cochambrosos a comprar hamburguesas a 0.99$ la unidad, mientras que la gente en los sitios caros eran en general estilizados.
Un amigo indio me comentó que en su país tienen un alto grado de diabetes debido al consumo masivo de arroz y otros carbohidratos con alto grado glucémico, que suelen ser bastante baratos. En los países africanos en los que he estado, están todo el día haciendo deporte y sin embargo los tipos "corpulentos" tienen una ven una "ventaja reproductiva", debido al elevado estatus que conlleva el poderse permitir estar gordo.

Este mismo ejemplo lo escuché en una presentación de un estudio sobre prevención de la obesidad en la población de etnia gitana en España. Hablaban que esta población tenía un alto riesgo de obesidad y problemas asociados a ella, como hipertensión, problemas de corazón, etc. Comentaban en el estudio que este problema era especialmente difícil de tratar en esta población ya que, en el caso de los hombres sobre todo, un peso elevado se asociaba a un buen poder económico y social.

Como ya vimos en algún artículo, la hipótesis Trivers-Willard dice que el éxito reproductivo de los machos en especies moderadamente polígamas (como lo es el ser humano) se incrementa drásticamente con pequeñas mejoras en el estatus y viceversa, lo que explicaría por qué la población masculina es especialmente sensible a estas percepciones de estatus y están dispuestas a incurrir en comportamientos que ponen en peligro su salud con el fin de aumentar su éxito reproductivo.

Y por último, hubo un comentario interesante sobre hábitos alimenticios según geografía:
A los británicos les encanta el pouridge y el brócoli hervido, y a los polacos y checos el chucrut, mientras que a mí me parece que atentan contra los derechos humanos....
Hay muchos estudios que han encontrado que la dieta de nuestras madres durante el embarazo afecta a nuestras preferencias (a través del liquido amniótico) tanto de bebés como de adultos. Hay una emoción básica que controla esto: el asco. Además, es muy interesante que esta emoción básica evolucionó a la emoción de asco social que hace que nos disgusten prácticas alimenticias o de uso del cuerpo que consideramos contaminantes y que provienen de otras culturas. Es la base del sistema inmune comportacional, del etnocentrismo y del racismo. La gastronomía es una forma más de definir grupos sociales.

Me ha gustado mucho ver como un artículo que en principio era sólo una reflexión a partir de dos fotos hechas con el móvil en un supermercado ha crecido hasta explorar diferentes facetas de qué, cómo y por qué comemos lo que comemos. Muchas gracias a estos compañeros por los comentarios que han motivado este artículo y espero que surjan muchos más de este y otros temas.

jueves, 17 de mayo de 2012

Obesidad y evolución en 2 imágenes

Hoy he encontrado dos noticias, que hablan del peligroso índice de obesidad y diabetes en la población actual tanto de España como de la mayoría de los países occidentalizados.

¿Por qué estamos engordando? ¿Tan mal hechos estamos?

Estamos muy bien hechos, pero aquí hay que distinguir entre una adaptación evolutiva y un subproducto. Una adaptación es un rasgo que surge como una respuesta a una presión del entorno y que confiere una ventaja reproductiva y de supervivencia a aquel que lo posee.

La adaptación en este caso es que comer nos produce placer (la dopamina y el núcleo accumbens son respectivamente la hormona y el centro del placer principal del cerebro) y además, no comer nos produce ansiedad (de nuevo la serotonina es la culpable de esto también). Pero ¿cuánto placer? No es lo mismo comer una manzana, un trozo de brócoli hervido, un filete de buen jamón o una napolitana de chocolate. Supongo que todos estamos de acuerdo en que no es lo mismo.

En el escenario en el que el ser humano ha evolucionado, había algunas cosas que estaban a su alcance y otras en las que tenía que invertir más energía para conseguir. Todas ellas tenían un balance de energía positivo, es decir, que la energía que obtenías al comerlo era superior a la que gastabas consiguiéndolo. De no haber sido así, no hubiesen surgido adaptaciones para motivarnos a conseguir cierto tipo de alimentos.

El hecho de que algunos alimentos requieran más energía que otros ha hecho que el placer que obtenemos al comerlos sea mayor en aquellos más escasos y costosos, pero a la vez más calóricos (por lo del balance de energía positivo). Por eso, una loncha grasienta de jamón es más apetecible que una patata (sin condimentos), y una patata es más apetecible que una hoja de acelga.

Esto estaba muy bien hasta que surgió la agricultura y la ganadería. En ese momento el hombre comenzó a disponer de azúcares provenientes de los cereales de cultivo y de carne y grasa de los animales de ganado sin tener que salir a cazarlos durante días. Sin embargo, aunque el coste de obtención de esa energía disminuyó considerablemente, podemos decir que en la edad de bronce los trabajos que se ejercían no eran para nada sedentarios.

Con la revolución industrial y económica se fueron cambiando los trabajos más físicos por otros más especializados y sedentarios, además de que la invención de la televisión y el ordenador personal han hecho que cada vez pasemos más tiempo sentados. Y entonces, vas al supermercado a comprar comida y te encuentras con esto:


Manzanas a 1,85€, 1,69€, 1,59€... Bueno, no está mal. Pero giras la cabeza y te encuentras con esto:


Una exposición de productos azucarados, grasientos e hipercalóricos con etiquetas de 1€ en la mayoría de ellos.

¿Cuál de estos productos me va a dar más placer? Por supuesto, el más grasiento y calórico que haya (una pista: no es verde). ¡Y además es más barato! (Tu cerebro no va a ponerse a pensar cuanto vale realmente un kilo de palmeras de chocolate, sólo ve la etiqueta de "1€" y lo compara con la etiqueta de "1,59€" de las manzanas).

Esto es un subproducto evolutivo, y es la principal causa de obesidad y diabetes en las sociedades occidentales. El coste la comida y el aporte calórico está totalmente distorsionado con lo que debería ser, o por lo menos, con lo que nuestro espera encontrar según el escenario evolutivo en el que ha vivido al menos los últimos 6 millones de años.

La próxima vez que compres una barrita de chocolate en la máquina del café, entres a una tienda de frutos secos y salgas con una palmera de chocolate o te pares delante del estand de bollería del supermercado, pregúntate: ¿Cuánto tendría que haber corrido un hombre de la edad de piedra para conseguir el equivalente en calorías de lo que voy a comer? Si no te salen las cuentas, muy seguramente, estás engordando.

-ACTUALIZACIÓN-

A partir de unos comentarios de Facebook sobre el artículo, decidí ampliar este tema y otros más en un segundo artículo sobre la evolución de como hemos acabado comiendo lo que comemos y por qué.

También he visto una noticia de hoy en El País en la que hablan de unas conclusiones publicadas en el British Medical Journal por un grupo de expertos de Oxford que proponen incrementar con impuestos del 20% el precio de las comidas y bebidas no saludables. El objetivo de esto sería precisamente lo que trataba en este artículo: aumentar el coste de los productos hipercalóricos para hacerlos menos accesibles para adecuarlos mejor al escenario evolutivo al que el ser humano está adaptado, de forma que la gente consuma menos este tipo de alimentos y mejore la dieta.

miércoles, 16 de mayo de 2012

¿Es posible un corralito en España?

Hoy voy a alejarme de la antropología y la neurociencia (aunque algún apunte se me escapará seguro) y voy a hablar un poco de economía, o por lo menos de lo que puede pasarle a la economía. Hace unos meses hablé sobre los sistemas multi-equilibrio. ¿Os acordáis? Copio-pego parte del artículo original:


Imagínate que estás en un concierto, de esos de verano, al aire libre, con varias filas de gradas que se elevan desde el escenario y en las que el público está sentado esperando a que salga el grupo principal después de un par de teloneros.

De repente, empieza a haber movimiento en el escenario y se ven a los primeros músicos aparecer. La gente empieza a mover la cabeza intentado adivinar entre la gente si sale ya el grupo o son los técnicos de sonido de nuevo preparándolo todo. De repente, en mitad de una de las filas de gradas, una chica se levanta para ver mejor lo que está pasando.

Automáticamente, la pareja que hay detrás de ella se levanta también y con ellos sus amigos que están sentados con ellos. Las filas de detrás van levantándose sucesivamente una detrás de otra para poder ver el escenario. Entonces, un chico se sube a las gradas para poder ver mejor, porque delante de él hay un grupo de jugadores de baloncesto y ellos también se han levantado y no puede ver bien.

Igual que ha pasado antes con la chica que se ha levantado al principio, la gente detrás de él comienza a pasar de estar levantados a subirse en la grada para ver mejor. Y por supuesto, la chica que se había levantado al principio y que ha desencadenado todo ve que la gente detrás suyo comienza a subirse en los asientos, así que para ver aún mejor decide subirse también a la grada ganando unos centímetros, ya que como el de detrás también está subido, no le molestará más que antes.

Al cabo de un rato, esta chica sale a comprar una cerveza a la barra, pero toda la fila de gradas continúa de pie subida a los asientos, aunque la chica que hizo que todo el mundo se levantase ya no esté en la grada. Curiosamente, en su camino hacia la barra del bar pasa por otra fila de gradas igual que la suya en la que todo el mundo está religiosamente sentado y escuchando el concierto mientras que en su fila la chica volverá y la gente continuará de pie y encaramada a los asientos.

Los sistemas multi-equilibio son aquellos en los que existen varios estados de equilibrio. Lo representábamos con una figura así:


Supongamos que esta es la situación inicial. En el caso anterior puede ser que la gente del concierto esté sentada, pero hoy vamos a hablar de economía. Vamos a suponer que la condición inicial es que la gente guarda el dinero que tiene en el banco. 

Esta es una estrategia óptima, ya que puedes sacar el dinero cuando quieras y está a salvo de posibles ladrones que entren en tu casa y te lo roben si lo guardas debajo del colchón. 

Ahora bien... Dijimos que los estados multi-equilibrio tenían dos estados estables. El otro estado sería este: 



La gente saca el dinero en los bancos y lo guarda en sus casas, con lo que los bancos pierden liquidez y no pueden darle dinero a la gente que aún tiene su dinero en el banco. En este caso, la estrategia óptima es sacar el dinero del banco, ya que si no dejan que lo saques, es como si no lo tuvieses y no puedes hacer uso de él, mientras que si lo has sacado antes vas a tener un poder adquisitivo mucho mayor que aquellos que no pueden sacar dinero. 

¿Qué tiene que pasar para que una estrategia pase de ser sub-óptima a óptima? En el caso del concierto, que la chica que tienes delante se ponga de pie. Entonces tu estrategia óptica es ponerte de pie para poder ver. Sin embargo en el caso de si mantener tu dinero en el banco o sacarlo es más complicado. No hay una fuerza visible, tangible, que te diga cuando hay un cambio en la estrategia óptima. 

En este caso es más una apuesta entre: saco mi dinero y me arriesgo a que entren en casa y me roben vs. dejo el dinero en el banco y me arriesgo a que no me dejen sacarlo. Ambas decisiones están motivadas por un virus muy contagioso: el miedo. El miedo a que te roben en casa o el miedo a que el banco no te deje sacar el dinero. 

En este punto podemos hablar de memética

¿Cuál de los dos miedos va a ser más fuerte? 

El miedo al corralito debe ser lo suficientemente poderoso y cercano como para superar la barrera del cambio de estado. Ir al banco y sacar el dinero es un acto que supone una barrera de por sí. En esto tendrán un poder muy importante los medios de comunicación, ya que no hay muchas noticias de asaltos o allanamientos de casas pero todos los días se está hablando de la caída de Bankia, de rescates a bancos, de la salida de Grecia y de un posible corralito en España. 

Otro factor muy importante es qué poder de difusión o contagio que tiene el meme. En el caso del concierto, no es lo mismo que la chica se levante en la última fila, donde no molestará a nadie, que en la primera. En el caso de la economía, hay que ver qué tipo de personas son las que pueden empezar a motivar en cambio de estrategia y qué poder tienen (cuantos son y en qué fila están). 

Para ello, vendría bien recordar que en España hay muchas personas mayores que han vivido una postguerra y saben lo que es el racionamiento. Además, este perfil es especialmente asustadizo y con unas relaciones sociales muy estrechas en pequeños y medianos grupos donde estos memes se extienden con rapidez (y si no que le pregunten a los partidos políticos qué pasa cuando anuncian una bajada de las pensiones). No me quiero imaginar qué pasaría si una parte muy importante de los jubilados de este país saca en un mes sus ahorros de los bancos. 

Otro grupo de personas que podría ser muy sensible a retirar los ahorros de los bancos son el 25% de la población activa en paro, al menos de los ahorros que aún les queden. Aquí podríamos hablar de que bajos niveles de serotonina (provocados por la falta de un empleo estable y una sensación de bajos recursos) aumentan la ansiedad, el miedo y la necesidad de control. 5 millones de personas cancelando sus cuentas bancarias son muchas cuentas. 

Ahora retomamos la pregunta del título: ¿Es posible un corralito en España? Todo es posible, y no va a depender ni del gobierno, ni de Europa, ni del BCE ni de los bancos. Va a depender de la evolución del miedo a la propia situación de un corralito. Al final, si ocurre (esperemos que no), será una profecía auto-cumplida, ya que nombrarlo y repetirlo en los medios que escucha una población especialmente sensible a perder el control sobre sus recursos habrá hecho posible que se produzca el corralito.

¿Vosotros a qué le tenéis más miedo? ¿A que entren en vuestra casa a robar? ¿O a no poder sacar dinero del banco? Respondiendo a esta pregunta os podéis hacer una idea de como va a evolucionar la situación. También podéis haceros esta misma pregunta cada semana para ver en qué momento la bolita roja del gráfico puede cambiar de estado.

jueves, 10 de mayo de 2012

Reacciones emocionales desde antes del nacimiento

Hace ya tiempo escribí una entrada sobre la biología de las emociones. Si le echáis un vistazo, entenderéis el diagrama que desarrollé para esa ocasión:


En este artículo hablaré de este subconjunto:


Como podéis ver, una emoción básica dispara un reacción emotiva. Dependiendo de la emoción la reacción será diferente. En el caso del miedo por ejemplo, dependiendo del escenario que dispare la emoción puede ser diferente, por ejemplo, escapar de la posible agresión o protegerse si no puede escapar, o disparar la emoción del enfado para repeler la amenaza. Estas reacciones son innatas y están integrados dentro de la programación de todo ser humano.

El otro día tuve una oportunidad de ver un ejemplo muy cercano con el que voy a comenzar la serie "socorro, mi padre es un antropólogo".

Como muchos padres de hoy, compramos un vale para que nos hicieran (ojo al plural mayestático) una ecografía 4D y ver a nuestra hija por primera vez sin tener que imaginárnosla entre bolas y rayas grises y negras. Al principio se dejó ver perfectamente, pero luego puso una mano delante y comenzó a chuparse el dedo.

La diferencia entre lo que te tienes que imaginarte en una eco tradicional y lo que se ve en una 4D

La técnica que hacía la ecografía comenzó a mover (más bien sacudir) donde estaba la mano para que la quitase, sin embargo, consiguió el efecto contrario. Pudimos ver como puso las dos manos delante de la cara protegiéndola en una reacción típica de protección como la que acabamos de hablar al comienzo de este artículo. Podéis ver las imágenes a continuación:



En la segunda imagen podéis ver la posición de los dos brazos delante de la cara.

Este es un ejemplo más no sólo de la universalidad de las expresiones faciales de las emociones básicas, sino de las reacciones generales de las emociones, desde el movimiento de las extremidades, respuesta del sistema nervioso central, etc.