jueves, 29 de noviembre de 2012

Cariño, esto no es lo que parece, es un experimento

En psicología evolucionista parece que hay una obsesión con el sexo, pero no es para menos. Cada uno de los sexos tiene diferentes costes de reproducción o inversión parental mínima, lo que define en cada ecosistema unas estrategias que maximizan el éxito reproductivo de un individuo dependiendo de su sexo, su condición, su posición social, su valor reproductivo, etc. Esto hace que se generen diferentes relaciones entre sexos, clases sociales, edades, generaciones, etc. en diferentes sociedades.

Esto está muy bien en el papel, pero para probarlo hay que diseñar experimentos y los hay de muchos tipos, desde las encuestas a los experimentos en los que los objetos de estudio no conocen el propósito real del experimento. Sin embargo, la mayoría de ellos se llevan a cabo en el entorno controlado y estéril de un laboratorio.

El laboratorio presenta un problema fundamental: no es un entorno real, por lo que es posible que los módulos mentales que deberían funcionar no lo hagan o lo hagan de una manera diferente, ya que muchos de ellos dependen del contexto.

Pongamos un ejemplo: En biología y antropología ha habido un largo debate sobre si la ovulación femenina humana era oculta o visible. A primera vista, las mujeres humanas no muestran los rasgos que muestran otros homínidos durante periodo fértil, como una inflamación de los pechos, ya que en los humanos esto es permanente una vez pasada la pubertad de la mujer. Supongamos que diseñamos un experimento en el que ponemos a un grupo de hombres en un laboratorio y les presentamos otro grupo de mujeres para que adivinen cuál de ellas está ovulando. ¿Esto podría funcionar? Lo más probable es que no, ya que si existe un módulo evolutivo en el hombre como adaptación a la ocultación de la ovulación de la mujer, no tiene por qué ser a nivel consciente.

Geoffrey Miller pensó en eso y decidió irse a clubs de striptease a preguntar a las bailarinas cuantas propinas recibían a lo largo de un mes. Con este artículo consiguió dos cosas. La primera fue que consiguió el Ig Nobel Prize 2008 que se da a los descubrimientos científicos más inusuales y triviales, y el segundo fue que probó que las bailarinas recibían más dinero en periodos de ovulación que cuando no eran fértiles. Esto, y ahora le voy a llevar la contraria a los Ig Nobel, no me parece nada trivial, ya que cuestiona la ocultación de la ovulación femenina y demuestra la discriminación (al menos inconsciente) por parte de los hombres de periodos de fertilidad en la mujer, sobre todo en un comportamiento puramente de cortejo como es el intercambio de dinero por sexo (en este caso, lap-dance).

Otro ejemplo de experimento en lugares en los que tu novia/mujer no se creería la excusa de "no es lo que parece, cariño, es un experimento científico", es el que el neuroescéptico denomina "el mejor experimento de todos los tiempos". Esta vez en lugar de elegir un club de striptease han escogido como entorno real del experimento un sex-club donde los socios van a realizar intercambios sexuales libres, solos o en pareja.

La excusa hipótesis que se quería probar era si los hombres que mantienen relaciones sexuales tienen mayores niveles de testosterona que los que solo miran. El resultado fue positivo, lo que tiene importantes implicaciones, ya que esta hormona afecta a ciertos rasgos de la personalidad y al comportamiento de la persona.

Así que ya sabéis, si sois un departamentos de psicología o antropología y estáis faltos de estudiantes que os ayuden a llevar a cabo los experimentos, igual tenéis que replantear el enfoque y buscar algo más "de campo"...

ResearchBlogging.orgMiller, G., Tybur, J., & Jordan, B. (2007). Ovulatory cycle effects on tip earnings by lap dancers: economic evidence for human estrus?☆ Evolution and Human Behavior, 28 (6), 375-381 DOI: 10.1016/j.evolhumbehav.2007.06.002

Escasa, M., Casey, J., & Gray, P. (2010). Salivary Testosterone Levels in Men at a U.S. Sex Club Archives of Sexual Behavior, 40 (5), 921-926 DOI: 10.1007/s10508-010-9711-3

miércoles, 28 de noviembre de 2012

En efecto biológico de la adversidad en los primeros momentos

Hace ya tiempo escribí sobre el efecto del cuidado y contacto directo en recién nacidos, sobre todo basado en el experimento de René Splitz en los años 40.

Hace un mes, PNAS publicó de forma abierta una serie de artículos muy interesantes sobre los efectos biológicos del estrés en edades tempranas en el coloquio titulado Biological Embedding of Early Social Adversity: From Fruit Flies to Kindergartners. A continuación copio titulo y abstract de algunos artículos que me parecen interesantes. Podéis encontrar todos ellos de forma gratuita y abierta en el link anterior:

Social stratification, classroom climate, and the behavioral adaptation of kindergarten childrenSocioeconomic status (SES) is the single most potent determinant of health within human populations, from infancy through old age. Although the social stratification of health is nearly universal, there is persistent uncertainty regarding the dimensions of SES that effect such inequalities and thus little clarity about the principles of intervention by which inequalities might be abated. Guided by animal models of hierarchical organization and the health correlates of subordination, this prospective study examined the partitioning of children's adaptive behavioral development by their positions within kindergarten classroom hierarchies. A sample of 338 5-y-old children was recruited from 29 Berkeley, California public school classrooms. A naturalistic observational measure of social position, parent-reported family SES, and child-reported classroom climate were used in estimating multilevel, random-effects models of children's adaptive behavior at the end of the kindergarten year. Children occupying subordinate positions had significantly more maladaptive behavioral outcomes than their dominant peers. Further, interaction terms revealed that low family SES and female sex magnified, and teachers’ child-centered pedagogical practices diminished, the adverse influences of social subordination. Taken together, results suggest that, even within early childhood groups, social stratification is associated with a partitioning of adaptive behavioral outcomes and that the character of larger societal and school structures in which such groups are nested can moderate rank–behavior associations.



Brain on stress: How the social environment gets under the skin
Stress is a state of the mind, involving both brain and body as well as their interactions; it differs among individuals and reflects not only major life events but also the conflicts and pressures of daily life that alter physiological systems to produce a chronic stress burden that, in turn, is a factor in the expression of disease. This burden reflects the impact of not only life experiences but also genetic variations and individual health behaviors such as diet, physical activity, sleep, and substance abuse; it also reflects stable epigenetic modifications in development that set lifelong patterns of physiological reactivity and behavior through biological embedding of early environments interacting with cumulative change from experiences over the lifespan. Hormones associated with the chronic stress burden protect the body in the short run and promote adaptation (allostasis), but in the long run, the burden of chronic stress causes changes in the brain and body that can lead to disease (allostatic load and overload). Brain circuits are plastic and remodeled by stress to change the balance between anxiety, mood control, memory, and decision making. Such changes may have adaptive value in particular contexts, but their persistence and lack of reversibility can be maladaptive. However, the capacity of brain plasticity to effects of stressful experiences in adult life has only begun to be explored along with the efficacy of top-down strategies for helping the brain change itself, sometimes aided by pharmaceutical agents and other treatments.

Experience and the developing prefrontal cortex
The prefrontal cortex (PFC) receives input from all other cortical regions and functions to plan and direct motor, cognitive, affective, and social behavior across time. It has a prolonged development, which allows the acquisition of complex cognitive abilities through experience but makes it susceptible to factors that can lead to abnormal functioning, which is often manifested in neuropsychiatric disorders. When the PFC is exposed to different environmental events during development, such as sensory stimuli, stress, drugs, hormones, and social experiences (including both parental and peer interactions), the developing PFC may develop in different ways. The goal of the current review is to illustrate how the circuitry of the developing PFC can be sculpted by a wide range of pre- and postnatal factors. We begin with an overview of prefrontal functioning and development, and we conclude with a consideration of how early experiences influence prefrontal development and behavior.

Social information changes the brain
Social animals live in complex physical and social environments requiring them to attend and rapidly respond to social and environmental information by changing their behavior. A key social influence is rank or status, a ubiquitous element in animal societies. Rank typically regulates access to reproduction and other resources, among other consequences for individuals. Because reproduction is arguably the most important event in any animals’ life, understanding how reproduction is regulated by social status and related physiological factors can instruct our understanding of evolutionary change. This article reviews evidence from a model social system in which reproduction is tightly controlled by social status. Surprisingly, changes in social status have rapid and profound effects over very short time scales and radically alter overt behavior, as well as physiological, cellular, and molecular factors that regulate reproductive capacity.

Associations between early life adversity and executive function in children adopted internationally from orphanages
Executive function (EF) abilities are increasingly recognized as an important protective factor for children experiencing adversity, promoting better stress and emotion regulation as well as social and academic adjustment. We provide evidence that early life adversity is associated with significant reductions in EF performance on a developmentally sensitive battery of laboratory EF tasks that measured cognitive flexibility, working memory, and inhibitory control. Animal models also suggest that early adversity has a negative impact on the development of prefrontal cortex-based cognitive functions. In this study, we report EF performance 1 y after adoption in 2.5- to 4-y-old children who had experienced institutional care in orphanages overseas compared with a group of age-matched nonadopted children. To our knowledge, this is the youngest age and the soonest after adoption that reduced EF performance has been shown using laboratory measures in this population. EF reductions in performance were significant above and beyond differences in intelligence quotient. Within the adopted sample, current EF was associated with measures of early deprivation after controlling for intelligence quotient, with less time spent in the birth family before placement in an institution and lower quality of physical/social care in institutions predicting poorer performance on the EF battery.

Prenatal exposure to antidepressants and depressed maternal mood alter trajectory of infant speech perception
Language acquisition reflects a complex interplay between biology and early experience. Psychotropic medication exposure has been shown to alter neural plasticity and shift sensitive periods in perceptual development. Notably, serotonin reuptake inhibitors (SRIs) are antidepressant agents increasingly prescribed to manage antenatal mood disorders, and depressed maternal mood per se during pregnancy impacts infant behavior, also raising concerns about long-term consequences following such developmental exposure. We studied whether infants’ language development is altered by prenatal exposure to SRIs and whether such effects differ from exposure to maternal mood disturbances. Infants from non–SRI-treated mothers with little or no depression (control), depressed but non–SRI-treated (depressed-only), and depressed and treated with an SRI (SRI-exposed) were studied at 36 wk gestation (while still in utero) on a consonant and vowel discrimination task and at 6 and 10 mo of age on a nonnative speech and visual language discrimination task. Whereas the control infants responded as expected (success at 6 mo and failure at 10 mo) the SRI-exposed infants failed to discriminate the language differences at either age and the depressed-only infants succeeded at 10 mo instead of 6 mo. Fetuses at 36 wk gestation in the control condition performed as expected, with a response on vowel but not consonant discrimination, whereas the SRI-exposed fetuses showed accelerated perceptual development by discriminating both vowels and consonants. Thus, prenatal depressed maternal mood and SRI exposure were found to shift developmental milestones bidirectionally on infant speech perception tasks.

Effects of early intervention and the moderating effects of brain activity on institutionalized children's social skills at age 8
The present study examined the social skills of previously institutionalized, 8-y-old Romanian children from the Bucharest Early Intervention Project and the influence of attachment security and brain electrical activity (alpha power) on these skills. Participants included children randomized to an intervention involving foster care [Foster Care Group (FCG)], children randomized to remain in institutions [Care As Usual Group (CAUG)], and never-institutionalized children living with their families in the Bucharest community [Never-Institutionalized Group (NIG)]. A continuous rating of children’s attachment security to their primary caregiver was assessed at 42 mo of age. When children were 8 y old, teachers rated their social skills, and the children’s resting electroencephalogram alpha power was recorded. Teachers rated social skills of FCG children who were placed into foster care before 20 mo of age as no different from NIG children, and both of these groups were higher than CAUG children and FCG children placed after 20 mo. Electroencephalogram alpha power at age 8 significantly moderated the relations between attachment security and social skills. These findings characterize institutionalized children’s social skills in middle childhood within the context of a randomized intervention while highlighting the roles of both relational and biological factors in these developmental trajectories.

Conserved epigenetic sensitivity to early life experience in the rat and human hippocampus
Early life experience is associated with long-term effects on behavior and epigenetic programming of the NR3C1 (GLUCOCORTICOID RECEPTOR) gene in the hippocampus of both rats and humans. However, it is unlikely that such effects completely capture the evolutionarily conserved epigenetic mechanisms of early adaptation to environment. Here we present DNA methylation profiles spanning 6.5 million base pairs centered at the NR3C1 gene in the hippocampus of humans who experienced abuse as children and nonabused controls. We compare these profiles to corresponding DNA methylation profiles in rats that received differential levels of maternal care. The profiles of both species reveal hundreds of DNA methylation differences associated with early life experience distributed across the entire region in nonrandom patterns. For instance, methylation differences tend to cluster by genomic location, forming clusters covering as many as 1 million bases. Even more surprisingly, these differences seem to specifically target regulatory regions such as gene promoters, particularly those of the protocadherin α, β, and γ gene families. Beyond these high-level similarities, more detailed analyses reveal methylation differences likely stemming from the significant biological and environmental differences between species. These results provide support for an analogous cross-species epigenetic regulatory response at the level of the genomic region to early life experience.

Socioeconomic gradients in child development in very young children: Evidence from India, Indonesia, Peru, and Senegal
Gradients across socio-economic position exist for many measures of children's health and development in higher-income countries. These associations may not be consistent, however, among the millions of children living in lower- and middle-income countries. Our objective was to examine child development and growth in young children across socio-economic position in four developing countries. We used cross-sectional surveys, child development assessments, measures of length (LAZ), and home stimulation (Family Care Index) of children in India, Indonesia, Peru, and Senegal. The Extended Ages and Stages Questionnaire (EASQ) was administered to parents of all children ages 3–23 mo in the household (n =8,727), and length measurements were taken for all children 0–23 mo (n = 11,102). Household wealth and maternal education contributed significantly and independently to the variance in EASQ and LAZ scores in all countries, while controlling for child's age and sex, mother's age and marital status, and household size. Being in the fifth wealth quintile in comparison with the first quintile was associated with significantly higher EASQ scores (0.27 to 0.48 of a standardized score) and higher LAZ scores (0.37 to 0.65 of a standardized score) in each country, while controlling for maternal education and covariates. Wealth and education gradients increased over the first two years in most countries for both EASQ and LAZ scores, with larger gradients seen in 16–23-mo-olds than in 0–7mo-olds. Mediation analyses revealed that parental home stimulation activities and LAZ were significant mediating variables and explained up to 50% of the wealth effects on the EASQ.

Early environments and the ecology of inflammation
Recent research has implicated inflammatory processes in the pathophysiology of a wide range of chronic degenerative diseases, although inflammation has long been recognized as a critical line of defense against infectious disease. However, current scientific understandings of the links between chronic low-grade inflammation and diseases of aging are based primarily on research in high-income nations with low levels of infectious disease and high levels of overweight/obesity. From a comparative and historical point of view, this epidemiological situation is relatively unique, and it may not capture the full range of ecological variation necessary to understand the processes that shape the development of inflammatory phenotypes. The human immune system is characterized by substantial developmental plasticity, and a comparative, developmental, ecological framework is proposed to cast light on the complex associations among early environments, regulation of inflammation, and disease. Recent studies in the Philippines and lowland Ecuador reveal low levels of chronic inflammation, despite higher burdens of infectious disease, and point to nutritional and microbial exposures in infancy as important determinants of inflammation in adulthood. By shaping the regulation of inflammation, early environments moderate responses to inflammatory stimuli later in life, with implications for the association between inflammation and chronic diseases. Attention to the eco-logics of inflammation may point to promising directions for future research, enriching our understanding of this important physiological system and informing approaches to the prevention and treatment of disease.

Early childhood poverty, immune-mediated disease processes, and adult productivity
This study seeks to understand whether poverty very early in life is associated with early-onset adult conditions related to immune-mediated chronic diseases. It also tests the role that these immune-mediated chronic diseases may play in accounting for the associations between early poverty and adult productivity. Data (n = 1,070) come from the US Panel Study of Income Dynamics and include economic conditions in utero and throughout childhood and adolescence coupled with adult (age 30–41 y) self-reports of health and economic productivity. Results show that low income, particularly in very early childhood (between the prenatal and second year of life), is associated with increases in early-adult hypertension, arthritis, and limitations on activities of daily living. Moreover, these relationships and particularly arthritis partially account for the associations between early childhood poverty and adult productivity as measured by adult work hours and earnings. The results suggest that the associations between early childhood poverty and these adult disease states may be immune-mediated.

Leveraging the biology of adversity to address the roots of disparities in health and development
Extensive evidence that personal experiences and environmental exposures are embedded biologically (for better or for worse) and the cumulative knowledge of more than four decades of intervention research provide a promising opportunity to mobilize evolving scientific insights to catalyze a new era of more effective early childhood policy and practice. Drawing on emerging hypotheses about causal mechanisms that link early adversity with lifelong impairments in learning, behavior, and health, this paper proposes an enhanced theory of change to promote better outcomes for vulnerable, young children by strengthening caregiver and community capacities to reduce or mitigate the impacts of toxic stress, rather than simply providing developmental enrichment for the children and parenting education for their mothers.


martes, 27 de noviembre de 2012

La cultura zombie como reflejo de la sociedad

The Walking Dead - fuente de la imagen screenrant

Hace ya un tiempo que leí a Levi-Strauss y sus análisis de los mitos como un modo de analizar las estructuras sociales de la cultura en la que se desarrollan esos mitos. Desde entonces me ha resultado interesante ver desde ese punto de vista los mitos de la sociedad occidental en la que vivimos y destriparlos para ver qué dicen de nosotros.

Hoy, poniéndome al día de los blogs que suelo leer he encontrado un artículo muy interesante en el que trata el fenómeno de la cultura zombie desde un punto de vista similar. Gran parte del artículo se basa en el trabajo From Voodoo to Viruses: The Evolution of the Zombie in Twentieth Century Popular Culture, en el que habla de la evolución de los zombies, desde la tradición haitiana, pasando por George Rodriguez y su peícula La noche de los muertos vivientes en el 68 hasta nuestros días.

Es interesante ver como a través del tiempo los zombies han ido asimilando los miedos de cada generación. En el film de Rodriguez los zombies vienen del espacio, en Day by Day Armageddon surgen de un escape nuclear y en el Retorno de los Muertos Vivientes es un escape de gas militar.

Los zombies de hoy en día son muy diferentes. Se transmite por infección, e incluso hay una diferencia en las películas según si son "zombies" o "infectados" por las características del zombie. En un mundo en el que puedes cambiar de continente 3 veces al día, una infección global es el miedo más común de fondo en la población. No hay más que recordar los ataques episódicos de pánico global y gente con mascarillas en aeropuertos por la gripe X (X = aviar, porcina, etc.).


También el post comenta la diferencia de los zombies con otras culturas pop anteriores, como los vampiros. No necesitas a dios para matar un zombie, lo que en una sociedad cada vez más laica y humanista se transforma en que los zombies son inmunes a cruces, agua bendita y estacas bendecidas. Este sería otro ejemplo de como la cultura moldea sus mitos y de como analizándolos se pueden conocer aspectos de la sociedad que los crea y donde evolucionan.

Como veis, no hay referencias a cruces ni agua bendita en la guía de supervivencia

No he podido leerme aún el trabajo completo que nombraba al principio, pero me parece muy interesante la evolución de la que habla y el análisis que hace del fenómeno zombie en varios ámbitos de la cultura, como películas, videojuegos o literatura.


ResearchBlogging.orgTwohy, M (2008). From Voodoo to Viruses: The Evolution of the Zombie in Twentieth Century Popular Culture Trinity College London

sábado, 10 de noviembre de 2012

¿De la cerveza a la agricultura?

Hace unos años tuve la suerte de visitar (como un turista más) uno de los asentamientos más antiguos e interesantes que se han encontrado hasta la fecha. Se trata de Göbekli Tepe, o el monte barrigudo, aunque por los artículo que voy a presentar hoy, es posible que esa tripa sea cervecera.


El artículo se titula "The role of cult and feasting in the emergence of Neolithic communities. New evidence from Göbekli Tepe, south-eastern Turkey". En él se presentan dos temas importantes.

El primero de ellos es la descripción del tipo de comunidad que habitaba el lugar. El sitio está ubicado en lo alto de un monte y parece haber sido el lugar de reunión de tribus de colectores-recolectores del neolítico pre-cerámico (Pre-Pottery Neolitic) que compartían la misma cultura, también encontrada en otros yacimientos de Turquía y Siria. Los dibujos en piedra que se han encontrado parecen describir rituales mágico-religiosos, danzas y animales presentes en la zona, sobre todo serpientes, escorpiones, jabalíes, ciervos y pájaros.

Este tipo de reuniones de tribus de cazadores-recolectores se da también en sociedades de cazadores-recolectores actuales, en las que se puede observar una estacionalidad de la cohesión social con periodos dispersos y otros más cohesionados en lo que se exhibe una mayor religiosidad. Estos ciclos vienen dados por la estacionalidad de los medios de producción. En este caso, una sociedad de cazadores-recolectores entre el Tigris y el Eufrates seguramente tendrían una gran dependencia de los recursos que tuviesen disponibles, tanto de caza y pesca como de vegetales salvajes que pudiesen encontrar.

A su vez, el hecho de que almacenasen alimentos (cosa sobre la que volveremos después) nos da pistas sobre el tipo de organización social que también comenta en el artículo. En sociedades actuales de cazadores-recolectores con un uso diferido de los recursos aparecen "acumuladores" o "grandes hombres" que hacen que el grupo compita con otros grupos en demostraciones de recursos comunales en forma de festivales. Ejemplos de esto los tenemos en los potlatchs de América del Norte o en los mumi de las Islas Salomon.

Es posible que en estas reuniones fuesen demostraciones de poder en forma de festivales de los grandes hombres de las bandas que formaban la tribu, lo que podría explicar de dónde salió la organización y la fuerza de trabajo necesaria para trasladar los monolitos a la cima de la montaña o incluso a quién representan. También nos da pistas de la posible estratificación social de esta sociedad.

Y aquí es donde viene el segundo punto interesante del articulo. En las excavaciones han encontrado unas bañeras de piedra en unas habitaciones que podrían haber servido de cocina. Entre los restos de la excavación han encontrado restos de cereales salvajes, como el trigo y la cebada. Esto ha hecho surgir de nuevo una pregunta que surgió ya en 1953 en el ‘Braidwood Symposium’. ¿La agricultura surgió para producir pan o cerveza?

En principio parece más sencillo llegar al descubrimiento de la cerveza que la del pan. Sólo tienes que dejar cereal con agua y dejar que fermente. Los efectos son mucho más divertidos que con el pan, más calóricos, eliminas el problema de la intolerancia al gluten, se conserva mejor y más tiempo y además, quitas también el sabor amargo que tienen los cereales salvajes a diferencia de los domesticados. En sociedades antiguas como en el Egipto faraónico se utilizaba la cerveza para pagar a los trabajadores, por lo que nos puede dar una idea del valor de este producto en la antigüedad.

Los autores han tratado encontrar trazas de oxalatos en los recipientes de piedra que se cree que habían servido para producir cervezas primitivas, pero los resultados no han sido concluyentes. En algunos casos fueron positivos y en otros negativos, por lo que tendremos que esperar a pruebas más precisas o nuevos descubrimientos.

Es una pena que los resultados no hayan sido concluyentes, sin embargo, la presencia en la zona y en el yacimiento de restos de cereales salvajes y las ventajas que aporta la cerveza nos devuelve a la pregunta de qué fue antes, ¿el pan o la cerveza?

ResearchBlogging.orgOliver Dietrich, Manfred Heun, Jens Notroff, Klaus Schmidt and Martin Zarnkow (2012). The role of cult and feasting in the emergence of Neolithic communities. New evidence from Göbekli Tepe, south-eastern Turkey Antiquity

jueves, 1 de noviembre de 2012

El efecto de la cultura en la locura

Imaginemos dos personas en diferentes partes del mundo, una en Estados Unidos y otra en India. Las dos escuchan voces en su interior, pero ¿dicen lo mismo? ¿Afecta la cultura a la forma en la que se manifiesta la esquizofrenia?

Según una conferencia en la ‘Culture, Mind and Brain conference’ celebrada en Los Angeles parece que sí. La charla se titula Hearing Voices in Accra and Chennai: How Culture Makes a Difference to Psychiatric Experience y presenta el trabajo de Tanya Luhrmann con pacientes diagnosticados con esquizofrenia según el DSM en tres culturas diferentes, USA, Ghana e India.


Todos ellos escuchaban voces, pero tanto las características de las mismas, como lo que decían cambiaba sustancialmente. Las voces americanas solían ser negativas y asociadas a la enfermedad diagnosticada. Las africanas estaban asociadas a dios, y en muchos casos eran voces buenas que les ayudaban a actuar correctamente y en el caso indio eran voces muchas veces de sus antepasados y que les decían cómo actuar correctamente en la sociedad, en algunas de forma bastante obscena e incluso graciosa.

Lo interesante de esto es que todos ellos parecen estar bajo el mismo fenómeno, pero la manifestación del mismo cambia según la sociedad. Es muy interesante ver cómo en algunas situaciones estas voces pueden ser incluso beneficiosas para el individuo, como en algunos casos africanos o indios, que los atribuyen a un dios o a un antepasado con voces positivas. Eso podría darnos alguna pista de cómo esta condición puede haber subsistido a lo lago de la historia de la humanidad, ya que al tener un gran componente hereditario, debe haber tenido alguna utilidad o haber dado algún beneficio para el que la padece, ya que de lo contrario, de ser un coste neto en toda situación, hubiese sufrido una selección negativa y hubiese desaparecido.

Tenéis más información sobre la charla en uno de los blogs de PLoS ONE.

Como habéis podido ver, he bajado el ritmo de publicaciones, en parte debido a que mis estudios de antropología me están ocupando parte del tiempo que tenía destinado a esto. De todas formas, este pequeño descanso de publicación espero que sirva para poder seguir escribiendo con un fondo más sólido y tener artículos cada vez con más chicha. 

miércoles, 3 de octubre de 2012

La cultura como adaptación al medio

Recuerdo hace unos años durante un viaje a República Dominicana conseguí un periódico local y me puse a ojear las noticias (un ejercicio que recomiendo a todo el mundo para conocer una parte de la sociedad que suele escapa a los turistas de hoteles todo-incluido). Ese día recuerdo que la noticia que me llamó la atención fue que el presidente había hecho público que los dominicanos debían saludarse, en lugar de con un apretón de manos, chocando los puños. Esto que puede parecer una ley para hacer el país más molón tiene mucha miga.

Comencemos por hablar de las adaptaciones al entorno. Para que exista una adaptación debe haber una presión del entorno que selecciona un rasgo y hace que otros no prosperen, haciendo este rasgo, con el tiempo, una parte de la población. Estas presiones pueden ser desde cambios climáticos, enfermedades, cambios en la alimentación disponible, en el ratio de sexos, en la competencia entre sexos, poblaciones... En este caso vamos a poner como ejemplo una enfermedad, la malaria, para ver diferentes tipos de adaptaciones a esta presión del entorno.

Para comenzar están las adaptaciones biológicas. Estas son las que vienen impresas en el ADN y que proceden de mutaciones aleatorias que hacen que aquellos que tienen inmunidad a esa enfermedad vivan y los que no, mueran. En nuestro ADN hay trazas de inmunidad en las diversas poblaciones a las enferedades que nos hemos ido encontrando a lo largo de la historia. Los europeos tenemos mutaciones que nos dan cierta resistencia a la viruela y la peste negra, a través de las diferentes epidemias que ha sufrido Europa y que ha seleccionado a aquellos individuos con estas mutaciones en el ADN que les daban más resistencia.

En el caso de la malaria hay una mutación en especial que aparece en poblaciones con origen africano y que hace que si se tiene una copia de ese gen, parte de los glóbulos rojos cobran una forma aberrante que los hace mucho menos eficientes para el transporte de hierro, pero que confieren inmunidad a la malaria. El mecanismo por el que lo consiguen sigue aún en estudio y parece que nuevos descubrimientos apuntan a la acción del micro-ARN de estos glóbulos rojos "mutantes" sobre el parásito. La mala noticia es que si se tiene ambas copias del gen todos los glóbulos rojos son de este tipo y la consecuencia es una enfermedad denominada anemia falciforme.

Frecuencia de la mutación en rs334 según poblaciones. Fuente.

Sin embargo, este tipo de adaptaciones biológicas son extremadamente costosas y lentas, ya que sólo se crean nuevas mutaciones con nuevas generaciones y con una edad generacional de unos 20 años, el ser humano debe sacrificar muchos individuos hasta que aparece una mutación que se hace extensiva al resto de la población para darle una inmunidad suficiente como para poder sobrevivir como grupo.

Un nuevo artículo en PLOS ONE (The Pace of Cultural Evolution) viene a poner a prueba la tesis que ya en su día sostuvo el antropólogo Julian Steward en Theory of Cultural Change de que la cultura es una forma de adaptación al entorno mucho más rápida y flexible que la adaptación biológica.

En el artículo analizan el ratio de mutación de rasgos culturales y el de rasgos biológicos controlando en tiempo y el periodo entre generaciones. Los resultados son que la cultura consigue adaptaciones más rápidas y en mayor número que los cambios biológicos. Esto se debe a varias causas que hace que se comporten más como una epidemia que como una herencia (¿no os viene a la cabeza la teoría de los memes de Dawkins?):
  • La naturaleza lamarckiana de los cambios culturales. Estos son dirigidos y los cambios en los padres son transmitidos a sus hijos, a diferencia de los cambios biológicos que son ciegos (esto no es totalmente cierto, ya que aquí habría que tener en cuenta los cambios epigenéticos y la expresión o inhibición de ciertos genes según presiones del entorno).
  • Los cambios culturales pueden transmitirse de forma vertical en ambos sentidos, de padres a hijos y de hijos a padres, y de manera horizontal, entre personas que no tienen ningún vínculo de parentesco.
  • Una persona puede adquirir diferentes rasgos culturales a través de su vida, mientras que para crear un cambio genético es necesaria una nueva generación y un individuo no puede alterar su ADN (de nuevo vuelvo a la expresión o inhibición de ciertos genes según presiones del entorno). 
Ahora volvemos a mi viaje a República Dominicana. Mi estancia coincidió con una epidemia de malaria cólera. Como la población de la isla no cuenta con inmunidad natural a esta enfermedad, el presidente decidió que para evitar contagios, los dominicanos debían saludarse sin tocar las palmas de sus manos. Un ejemplo perfecto de la adaptación de un rasgo cultural como es el saludo a una presión del entorno real. Este cambio en el saludo es mucho más rápido que esperar a que media isla muera y ver si hay alguien que espontáneamente muestra una inmunidad natural a la enfermedad y confiar en que sus descendientes repueblen la isla. 

Cómo no, otra adaptación cultural es la tecnología, en este caso la medicina. Antes de ir a algunos países las agencias de viaje y los ministerios de sanidad nos recomiendan vacunarnos antes de ir y durante nuestra estancia. Realmente esto es muy interesante, ya que es una adaptación tecnológica que utiliza un adaptación fenotípica (la inmunológica) que al fin y al cabo es biológica

Al final, parece que Steward tenía razón. 


ResearchBlogging.orgPerreault C (2012). The pace of cultural evolution. PloS one, 7 (9) PMID: 23024804

Steward, J (1990). Theory of Culture Change: The Methodology of Multilinear Evolution University of Illinois Press Other: 0252002954

domingo, 2 de septiembre de 2012

Reconocimiento automático de fotos de grupo de fiesta

Esta semana un amigo me mandó un artículo que me podría interesar y dio la casualidad que mirando los autores encontré a una ex-compañera de la carrera de ingeniería informática (¡enhorabuena por el paper Ana Cris!). El artículo se titula Urban Tribes: Analyzing Group Photos from a Social Perspective y trata del reconocimiento de atributos sociales en fotos de grupo.

Técnicamente me parece muy bueno. Consiguen unir varios algoritmos de reconocimiento de personas y facial, a la vez que extraer algunos atributos como % de piel visible, el sexo, si sonríe o no, si tiene el pelo largo, si lleva sombrero, si tiene camiseta o manga larga, la distancia entre las caras, etc. El objetivo principal del trabajo es conseguir agrupar automáticamente por medio de estos atributos fotos pertenecientes a lo que ellos llaman "tribus urbanas". Sin embargo, lo que parece una utilización de la teoría de señalización aplicada a la categorización de grupos sociales, tiene algunos puntos que me gustaría poder comentar, al menos que puedan servir para afinar trabajos de este tipo en el futuro.

En primer lugar, el artículo parte de la afirmación de que en las fotos de grupo aparecen personas que pertenecen a la misma tribu urbana. Pero ¿Qué es una tribu urbana? ¿Qué tipos de grupos existen? ¿Son todos los grupos tribus urbanas?

En principio, los metadrives darwininanos nos definirían dos tipos de grupos, uno sería el grupo familiar, regulado por la selección de parentesco y el segundo sería el grupo cercano regulado por el altruismo recíproco. Además de estos dos, tendríamos los grupos de trabajo, que no tienen por qué tener relaciones sociales fuertes, pero que hacen que los miembros trabajen en objetivos comunes, y por último tenemos el grupo cultural, que es lo que se conocería por "tribu social".

¿Qué caracteriza a una tribu urbana? 

Una tribu urbana es un grupo social con un grupo de señales comunes y distintas del resto del conjunto de la sociedad. Como todo grupo social, tendrá máscaras de alto coste que identifique a los que las poseen como miembros del grupo, y tendrá su propia jerarquía de medallas que regulará la jerarquía social de sus portadores, además de su preferencia por ciertas plumas e incluso personalidad asociada al grupo social (los moteros tienen una personalidad diferente a los emos o los hippies). Esto es parte del efecto que tienen las máscaras y la supresión de la personalidad individual y la adopción de caracteres del grupo social al que se asocia esa máscara, efecto conocido como vestimenta incorporada.

Los 5 grandes rasgos de la personalidad, que se pueden aplicar también a los grupos culturales.

Además de todo esto, tenemos que diferenciar entre contexto y persona. Un contexto social va a definir unas normas sociales y convenciones específicas que en algunas ocasiones van a implicar la aplicación de ciertas señales y el tabú de otras. No es lo mismo un contexto de playa que un contexto de una boda.  Sin embargo, la pertenencia a un grupo social será independiente del contexto social. ¿Qué implicaciones tiene esto?

Yo mismo puedo aparecer en fotos de grupo en diferentes contextos sociales, como en la playa, jugando un partido de fútbol, de boda, en una fiesta de disfraces y tomando unas cañas en un bar. Cada uno de estos contextos tienen normas de vestimenta y tabús que restringen las señales que se muestran en cada uno. En la playa llevaré bañador, en el partido camiseta y pantalones cortos, de boda iré con traje y corbata, en la fiesta de disfraces quién sabe qué llevaré puesto y en el bar iré casual. Sin embargo, tal y como está planteado el artículo, yo, siendo la misma persona, pertenecería a 5 "tribus urbanas" diferentes por el hecho de aparecer en contextos sociales diferentes.

Esto no es malo. Podría ser interesante un trabajo futuro en la distinción de diferentes contextos sociales, basándose en convenciones de este tipo, de hecho, es muy similar a los que han conseguido ya en este artículo. Esto podría tener implicaciones muy potentes en la segmentación de público para publicidad en redes sociales tipo Facebook (alguien que suele ir a la montaña le iteresarán botas de montaña, y alguien que va mucho a la playa tablas de surf).

Otra guerra es la distinción de tribus urbanas. Como hemos dicho, una tribu urbana se caracteriza por el uso de un grupo de señales distintas del resto de la sociedad general en la que se desarrolla e independientemente del contexto social en el que se tome la foto. En el artículo veo que tienen acceso a atributos muy interesantes para la detección de señales, entre ellos el % de piel, tipo de peinado, sombrero, gafas, etc. Para futuros trabajos, me parecería muy importante desarrollar identificadores automáticos de:
  • Tipo de maquillaje: Si se tiene acceso al color de piel, sexo y a la posición de los labios y ojos se podrían desarrollar detectores del tipo de maquillaje, como color del pintalabios, sombra de ojos, maquillaje en hombres, etc. Esto es muy importante, ya que algunas tribus urbanas se caracterizan por usos distintivos de maquillaje o la ausencia del mismo (hippies, pijos, goticos...). 
  • Detección de vello facial: Como máscara, el vello facial en hombres es muy útil para su asociación a diferentes grupos culturales. Los roqueros, los frikis, los hipster, etc. tienen sus bigotes, patillas y barbas características, que ayudarían a la identificación del grupo de cada individuo.
  • Tatuajes y piercings: Como decoración corporal, los tatuajes y piercings constituyen una máscara fiable para la pertenencia a ciertos grupos sociales. Los tatuajes podrían reconocerse mediante detección de % de ruido en zonas de piel y los piercings por brillos rodeados de piel. Los góticos, hippies, pijos, moteros, etc. tienen diferentes usos de modificaciones corporales y se podrían agrupar por medio de estos de manera fiable. 
  • Reconocimiento de marcas en vestimenta: Las marcas comerciales son medallas fiables que confieren posición social en ciertos grupos que basan su jerarquía en el poder económico. La detección de logos en la ropa (Adidas, Nike, D&G, etc.) podría darnos muchas postas sobre el grupo social al que pertenecen, ya que al ser elementos de alto coste, estos tienen que ser identificados y valorados por el grupo social al que se pertenece. 
  • Jerarquía de grupo: Por lo que veo en el artículo, tienen acceso a la posición relativa de las cabezas. Sería interesante ver si se pueden hacer inferencias de la jerarquía dentro del grupo, tales como identificar al individuo de sexo masculino de mayor altura en el centro del grupo. Esto nos daría una idea del tipo de grupo en el que estamos por medio de las señales que exhiba el macho dominante (¡¡¡no olvidar que somos primates!!!).
  • Tipo de grupo por tamaño y cohesión: La clasificación que nos da Dunbar de los grupos según su tamaño podría ser útil, ya que podemos tener parejas (2), grupos de apoyo (3-5), familias (12-15), clanes (35-50) y tribu (150). Además, habrá una diferencia notable entre la cohesión del grupo si las personas que aparecen pertenecen a estos grupos o no. No es lo mismo una foto del departamento de una universidad que una foto de familia o una foto de ex-alumnos de instituto.

Grupos sociales por tamaño según R. Dunbar.

Para terminar, hay un aspecto que he visto del artículo que supone un sesgo en el tipo de imágenes que se procesan. A la hora de recopilar las imágenes para el experimento, han buscado en internet fotos con las palabras “group picture” o “party picture”. Esto hace que sólo aparezcan fotos en el contexto de fiesta y bares. Este sesgo aparece representado en la familia L2 que muestra la agrupación por custers de uno de los métodos de agrupación que utilizan.


Como vemos, en ambos, pero sobre todo en SoP detecta una mezcla de la mayoría de los grupos con el L02 (Informal Pub). ¿Qué hubiese pasado si se hubiesen buscado imágenes que no sólo hubiesen sido de fiesta? Muchas tribus urbanas se manifiestan también fuera de los bares, pensemos en los moteros en concentraciones, los hippies en conciertos y festivales, los bikers... Todos salen de fiesta pero también podemos encontrar fotos de todos ellos fuera de este contexto social, incluso en contextos propios que definen su pertenencia a un grupo cultural (pensemos en los montañeros)


Grupo de moteros en pleno ritual fuera del bar

En resumen, me ha parecido muy interesante el trabajo, ya que supone una primera aproximación al reconocimiento de señales sociales en informática gráfica. Sin embargo, aún queda mucho por hacer y aunque los resultados son muy prometedores, sería muy enriquecedor para futuros trabajos contar con la experiencia de un antropólogo o un sociólogo que pueda dirigir los esfuerzos en el reconocimiento de señales sociales para maximizar el éxito del trabajo. Esto me recuerda a una charla a la que fui en la que uno de los miembros de desarrollo de DeepBlue nos contaba que fueron capaces de vencer a Kasparov no porque el ordenador fuese superpotente, sino porque tuvieron la suerte de que uno de los desarrolladores sabía jugar al ajedrez a nivel de competición y pudieron optimizar el algoritmo para ser todo lo eficiente posible.


ResearchBlogging.org Murillo, A.C.; Kwak, I.S.; Bourdev, L.; Kriegman, D.; Belongie, S. (2012). Urban tribes: Analyzing group photos from a social perspective Computer Vision and Pattern Recognition Workshops (CVPRW), 2012 IEEE Computer Society Conference on : 10.1109/CVPRW.2012.6239352

sábado, 1 de septiembre de 2012

Flashes de antropología urbana

Hoy presento un nuevo blog en el que voy a publicar pequeñas muestras de la vida cotidiana urbana vistas desde el punto de vista de la antropología, la sociología y la evolución humana.

Podéis encontrarlo en http://urbantropologo.tumblr.com/

Se trata más de un foto-blog que de un blog como este. Van a ser todo entradas con imágenes y pequeñas descripciones. Trataré temas como los ritos de paso, profiling y teoría de la señalización, cortejo, antropomarketing y muchas más cosas que encontraré y que iré publicando.

Esto me permite enlazar cosas de las que hablo en este blog de manera más extensa con ejemplos en la vida real que muchas veces pasan desapercibidos o a los que estamos tan acostumbrados que ni nos damos cuenta de su existencia.

Espero que disfrutéis y lo encontréis interesante... Y para muestra un botón:

 Tienda organizada en islas entre las que se puede caminar eligiendo los productos. Esta configuracion es muy similar al escenario evolutivo de arbustos durante una actividad de recoleccion.

viernes, 31 de agosto de 2012

¿Nacer con cerebros más inmaduros podría ser la clave de la inteligencia humana?

Estaba revisando el artículo que comentaba ayer y de repente me vinieron a la cabeza varias cosas:

  • La primera es que al ser exponencial el aumento del gasto energético en el útero y lineal (debido seguramente a que dentro del útero no tiene que desarrollar funciones como mantener el calor corporal, digestión, respiración, etc.), esto haría que un bebé humano no alcanzase la el nivel de un chimpancé a los 18 meses de la concepción (el punto con estrella en el gráfico), sino a algo más de los 10 meses, lo que no supone un aumento de 9-12 meses de gestación sino sólo 1. 
  • Esto aumento es imposible debido a que el cerebro es mucho mayor en el caso de los humanos, por lo que nacen con un 30% de la masa adulta en lugar de un 40% de los chimpancés
  • Esto implica que ese 10% de diferencia de desarrollo, en el caso de los humanos de convierte en lugar de 1 mes en 9-12
  • Durante este periodo el cerebro humano está expuesto a muchos más estímulos que en el mismo periodo de desarrollo los chimpancés, que se desarrollan hasta el 40% en el útero materno


Si tenemos en cuenta dos artículos aparecidos hace unos meses en PNAS: 
En el primero hablan de que el cerebro humano no es más que un cerebro de primate muy grande, y en el segundo hablan de la especialización de módulos funcionales en el cerebro por medio de estímulos repetidos (podéis leer el post que escribí sobre este artículo aquí). 

Si juntamos todo tenemos un cerebro que en comienza un 10% antes a recibir estímulos durante un periodo mayor de tiempo (9-12 meses), lo que llevaría a la creación precoz de módulos funcionales para el lenguaje, habilidades sociales, reglas lógicas, habilidad motora... Esto haría que cuando el bebé humano llega a este 40% de la masa del adulto, lleva mucha ventaja al bebé chimpancé que acaba de nacer y aún tiene que exponerse a las reglas y estímulos lógicos (gravedad, continuidad temporal y espacial, etc.), motoras, sociales, lenguaje (gestual, facial y vocal), etc.

¿Podría ser esta especialización precoz del cerebro una de las bases que posibilitaría la inteligencia humana? La privación de algunos estímulos, como los sociales, lenguaje, etc., tienen efectos devastadores a muy tempranas edades

Si esta hipótesis fuese correcta, ¿se podría inferir la capacidad cognitiva de algunos homínidos y primates a través del grado de exposición en etapas tempranas de desarrollo cerebral? Se podría comprobar con primates actuales (chimpancés, bonobos, gorilas y orangutanes) y ver si esto podría extrapolarse a otros homínidos extintos (habilis, erectus, neandertal, etc.).

jueves, 30 de agosto de 2012

¿Por qué el embarazo dura 9 meses?

Hoy ha salido publicado por fin un artículo que llevaba algún tiempo esperando. Se trata de Metabolic hypothesis for human altriciality (Hipótesis metabólica para la altricialidad humana).

La altricialidad es el estado no maduro en el que nacen algunas crías de mamíferos. En el caso de los humanos, se trata de lo que podríamos considerar una altricialidad secundaria, ya que tienen los orificios de los sentidos abiertos y funcionales, pero hay una gran diferencia entre el desarrollo de los humanos al nacer y el del resto de primates. Para hacernos una idea, un niño humano alcanza el nivel de desarrollo de un chimpancé recién nacido a los 9-12 meses de vida.

¿Por qué ocurre esto? 
¿Por qué los bebés humanos no nacen ya maduros?

Hasta ahora la explicación que se daba era la hipótesis conocida como dilema obstétrico (DO). Éste dice que existe un compromiso entre la anchura de la pelvis de la mujer y su eficiencia en el bipedismo. Una cadera más grande no podría caminar bien, y una cadera más pequeña supondría un peligro a la hora de dar a luz, tanto para la madre como para el niño, así que esta es una solución de compromiso entre poder andar y dar a luz niños lo suficientemente maduros como para poder completar su desarrollo fuera del útero materno.

El artículo que presento hoy primero ataca esta hipótesis por dos flancos. El primero es que no hay pruebas de que la capacidad de andar se reduzca con una mayor amplitud de la cadera, ya que esta hipótesis se hizo con un modelo estático de los músculos y el esqueleto, pero un modelo dinámico muestra que esa desventaja puede corregirse con una modificación en los movimientos a la hora de andar.

El segundo frente que ataca es que si los niños estuviesen más tiempo en el útero, tendrían la cabeza demasiado grande como para poder salir. Sin embargo, un volumen similar al de los chimpancés en el momento del nacimiento (un 40% de su volumen adulto) se conseguiría con sólo 3cm más de diámetro craneal, lo que supondría dilatar 3cm más, algo que según el artículo está dentro de las dimensiones de la mujer actual.

El punto que presenta como desencadenante del parto es que el consumo metabólico del feto supera lo que la madre puede proveer. Imaginaos que en casa comenzamos a enchufar aparatos eléctricos. Que si el horno, la lavadora, la tele de 50'', el aire acondicionado, el lavavajillas... Al final, el diferencial saltará. Pues lo mismo ocurre con la madre.

Fuente de la imagen: ecodevoevo.blogspot.com.es

Como vemos en este gráfico, el consumo energético del feto en el útero materno crece exponencialmente, mientras que lo que la madre puede suministrar de forma mantenida está en el límite de un 2.1 veces el ratio metabólico basal. La línea de círculos (el bebé) se cruza con la de la madre (los cuadros) justo en los 9 meses de embarazo. Cuando la madre no puede suministrar energía suficiente al feto, se desencadena la dinámica de parto.

Esto podría explicar por qué los médicos recomiendan andar para acelerar el parto... Aunque como dice la autora del artículo en su blog, siempre hay que fiarse de lo que diga el médico. Si leeis esto, ni se os ocurra dejar de comer ni poneros a correr maratones para provocar el parto. Siempre preguntad al médico antes de hacer nada.

Y ahora me voy a pasear con mi mujer a ver si disminuimos la energía disponible de mi hija y se anima a salir...

Actualizo: He escrito otro post con algunas implicaciones que podría tener nacer con cerebros más inmaduros aquí.

ResearchBlogging.orgDunsworth HM, Warrener A, Deacon T, Ellison P, and H Pontzer (2012). Metabolic hypothesis for human altriciality PNAS on-line early view DOI: 10.1073/pnas.1205282109

viernes, 24 de agosto de 2012

Ángeles, púas, plumas y totems

Como ya habéis visto en algunas ocasiones, soy un defensor de la teoría de la señalización. Esta teoría viene a decir que las personas somos seres sociales y necesitamos comunicarnos, para lo cual utilizamos diferentes formas de lenguaje. Sin embargo, este canal de comunicación es limitado, ya que sólo permite la comunicación de una unidad de información por canal al mismo tiempo (ya sea lenguaje autónomo, gestual o expresiones faciales). Sin embargo, los seres humanos tenemos otra forma de comunicación unidireccional y que nos permite dirigirnos a muchas personas a la vez de forma constante: el uso de señales.

Estas señales dan información sobre nuestro estatus social, valor reproductivo, nuestra personalidad, inteligencia, grupos sociales a los que pertenecemos, creencias, etc. Estas señales son entendidas por todos de forma consciente o implícita dentro de la misma cultura y grupo social. Ésta es una característica esencial de las señales: quien las debe recibir debe entenderlas, ya que muchas de ellas son muy costosas y sería una pérdida ingente de recursos crear una señal (y en algunos casos defenderla) si quien debe recibirla no la entiende.

En algún artículo ya hice algún experimento de qué es lo que se puede saber de alguien a simple vista mediante la creación de perfiles o profiling. Esto consiste en interpretar de forma consciente las señales y poder hacer un perfil psicológico básico de la persona que las manda para poder inferir y anticipar su comportamiento.

Hoy voy a intentar hacer un ejercicio diferente. Voy a poner por escrito y organizados los diferentes tipos de señales que he podido identificar. Para ello voy a utilizar varias cosas, desde algo de neurociencia (esta vez sólo lo necesario), psicología evolucionista y algo de los ritos de paso de Van Gennep.

Lo primero: ¿Qué considero como señal? Consideraré como señal toda modificación/decoración corporal, accesorio, creación o posesión que:
  • No tengan una orientación puramente funcional, es decir, que además de la función que desempeña, sirve para mostrar un rasgo social, cultural o personal de quien lo usa o posee
  • Sirve para mandar información que es entendida por los miembros del mismo grupo social 
  • Suponga un gasto conspicuo: es decir, que habiendo alternativas disponibles menos costosas, se ha elegido esa libremente
Para clasificarlos utilizaré los meta-drives darwinianos que utiliza normalmente Gad Saad:
  • Supervivencia
  • Reproducción
  • Selección de parentesco
  • Altruismo recíproco
Y con esto dicho... comenzamos:

Señales de atención discriminativa
Estas señales son las que se utilizan en escenarios donde se opta a la competición de recursos compartidos escasos y controlados por personas concretas. Estos escenarios, dentro de los meta-drives darwininanos pueden ser, o de reproducción (donde el recurso escaso es el acceso a sexo, sobre todo en el caso de las mujeres por su mayor inversión parental) y la supervivencia (donde incluyo en este caso la negociación de estatus como una forma de negociación de acceso a recursos escasos dentro de una sociedad). 

Dentro de esta categoría de señales que nos dan ventaja en situaciones de atención discriminativa podemos encontrar los siguientes tipos: 

Plumas: Estas son de las señales más visibles y extendidas. Pueden ser físicas, como partes del cuerpo que muestren valor reproductivo (pechos, glúteos, músculos, simetría facial, cabello, etc.), artísticos (saber tocar un instrumento, cantar, bailar), intelectuales (hablar varios idiomas), altruistas (activismo político y en ONGs, donaciones millonarias)...

Medallas: También muy extendidas. Son similares a las plumas, pero acreditan, a través del gasto de recursos conspicuo el reconocimiento fiable de una condición. Aquí podemos incluir medallas de tipo intelectual (títulos universitarios), deportivas, y sobre todo de estatus económico. Un reloj o un coche de lujo se puede considerar una medalla de alcanzar el poder económico suficiente como para poder permitirse gastar esa cantidad de dinero sin que afecte significativamente a tu nivel de vida.  

Púas: Dentro de la supervivencia, tiene especial importancia la agresión y la defensa cuando la negociación de estatus falla o debe renegociarse. Aquí agruparé todas aquellas señales que avisen de una agresividad directa (como forma de conseguir un estatus superior) o recíproca (como forma defensa). Podemos hablar aquí de tatuajes, escarcificaciones, perforaciones y modificaciones corporales dolorosas en general como forma de señalizar una alta tolerancia al dolor, aunque también podemos hablar de actitudes agresivas físicas como enseñar los músculos de los brazos, imágenes agresivas de animales, símbolos macabros, etc., portar armas...

Escamas: Igual que hay quien señaliza agresividad porque tiene una gran confianza en ganar un enfrentamiento con alguien de estatus similar, hay quien tiene una actitud completamente contraria y va a ocultar cualquier tipo de señal y evitar los enfrentamientos. La falta de señal también es una señal y aquí podemos hablar de flequillos que tapan la cara, capuchas, vestidos anchos, etc.

Handicap: Son señales que a simple vista disminuyen la condición y los recursos, pero que en realidad lo que señalizan es un exceso confiado de ese recurso. Aquí podemos incluir sobre todo comportamientos de riesgo como fumar y beber entre adolescentes, conducir de forma temeraria, o como escuché el otro día, comprarse un iPhone y destrozarlo en plena calle delante de la gente que está haciendo fila para comprar uno. Podríamos poner también aquí las camisas y polos rosas para hombres. Al ser el rosa un color femenino, un hombre que lleva algo algo rosa puede interpretarse como una gran confianza en su posición.

Tótem: Dentro de esta categoría voy a incluir también lo que he llamado "totems". Ojo porque con esta denominación no me refiero a la concepción indigenista de totem como guardian o protector de un poblado o grupo social. En este caso, lo que considero totem es algo que se porta con la intención de que alguna de sus propiedades pasen a su portador.

Este efecto se basa en el efecto de contagio que conocen los profesionales del neuro-marketing o a la base del sistema inmune comportacional, que se utiliza también este proceso cognitivo de traspaso de propiedades de un elemento a otro por contacto o proximidad. Van Gennep también describió ritos por contagio, en los que las propiedades de uno de los elementos del rito pasaban al protagonista del mismo. 

Para hacernos una idea de la relación que intento transmitir, imaginaos la que existe entre la araña y Spiderman. La araña sería el tótem y transmitiría sus propiedades a una persona. En este caso es por contacto (una picadura), pero en el caso de los tótems a los que me refiero en este artículo la transmisión sería efectiva cuando se porta esa señal.

Dentro de esta categoría podemos encontrar por ejemplo, marcas (en las que las propiedades de la marca se transmiten al portador), personajes famosos (reales o imaginarios en los que su personalidad o habilidades se espera que pasen también al portador), tatuajes o colgantes con palabras tipo "fuerza", "fuego", "amor", etc. 

Ángeles: Un ángel va a ser un elemento protector. La diferencia con los totem es que en el caso del ángel, se considera que tiene cierta agencia y el efecto es indirecto. Con el totem, el hecho de llevarlo nos confiere directamente sus propiedades. El ángel va a actuar en situaciones en las que se le necesite y al contrario que el tótem, no funciona por contagio, sino que tiene su propia agencia. 

Aquí podemos considerar desde amuletos de protección contra la mala suerte o el mal de ojo, vírgenes, santos, cruces, fotos de familiares (a las que se les atribuirá agencia de por sí), etc.

Señales relacionadas con la pertenencia a grupo:
Agruparé aquí las señales de afiliación a grupos, tanto familiares (selección de parentesco) como sociales (altruismo recíproco).

Proyecciones: Serán elementos que simbolicen a una persona. Estos pueden ser desde elementos de guarda de pareja, como los anillos (que simbolizan al otro cónyuge), tatuajes con el nombre de la pareja, los padres, los hijos, colgantes o pulseras con el nombre de alguien cercano, etc. Aquí pueden aparecer también imágenes de gente famosa y combinarse los tipos de proyección y totem. También como hemos visto, se le puede dar una agencia propia, como en el caso de un familiar fallecido, por ejemplo, y ser una proyección-ángel.

Emblemas: Los emblemas son señales de simpatía o afinidad con un grupo social. Esta relación con el grupo social es libre, no implica ningún beneficio ni tabú especial y puede abandonarse libremente. Podemos hablar aquí de camisetas de fútbol, banderas de países, camisetas de grupos de músicas...

Máscaras: Las máscaras son señales que muestras la pertenencia a un grupo social. He utilizado esta denominación por el uso de máscaras por los hechiceros en las sociedades tribales ahora veréis por qué. 

La diferencia entre emblemas y máscaras es muy importante. 
  • Un emblema es una relación de afiliación o simpatía libre con un grupo social. La máscara sin embargo es una relación de pertenencia que puede ser impuesta o no, pero que una vez conseguida, es muy difícil o imposible de abandonar, por lo cual, van a ser señales permanentes. 
  • Un emblema es una señal poco costosa, sin embargo, las máscaras van a ser muy costosas, ya que deben ser señales difíciles de conseguir por los miembros fuera del grupo. En los casos extremos podemos hablar de mutilación o decoración genital, deformación de cráneo, escarcificación... o pruebas de acceso especialmente complicadas, costosas y restringidas. Son cosas que alguien fuera del grupo no estaría motivado a hacer. 
  • El uso de máscaras elimina parte de la personalidad del portador para sustituirla por el estereotipo de comportamiento del grupo al que pertenece. Sin embargo, en el caso del emblema, el portador conserva completamente su personalidad. 
  • En uso ilícito de una máscara por alguien que no pertenece al grupo social constituye una ofensa grave que puede ser severamente castigada. En el caso de los emblemas, no ocurre esto. 
  • El uso de máscaras provee al poseedor de autoridad y tabús especiales sobre el resto de la sociedad. Pensemos por ejemplo en un traje de policía, el cual da autoridad para privar de libertad o recursos a otros ciudadanos, pero les impide realizar ciertas acciones (normas de vestimenta y apariencia, comportamiento, restricción de consumo de drogas, etc.). Los emblemas no confieren ni autoridad ni tabús a su portador. 
  • Otra característica esencial de las máscaras es que deben de ser concedidas por los miembros de la comunidad a la que se entra. No se pueden adquirir libremente como en el caso de los emblemas.
Una misma señal puede ser un emblema o una máscara dependiendo del contexto y quién la lleve. Para ver la diferencia, por ejemplo, pensad en una camiseta del Barça. La misma camiseta del Barça no es lo mismo que la lleve un señor cualquiera a la entrada de un campo de fútbol que la lleve un jugador profesional. Al señor no le permiten acceder a los vestuarios por llevar la camiseta, pero señaliza simpatía hacia uno de los equipos. Sin embargo, al jugador del Barça lo identifica como un jugador, y elimina parte de su personalidad para convertirlo en un jugador del equipo que se va a comportar igual que sus compañeros. 

Cómo ya hablamos en otro artículo, la  cognición incorporada o embodied cognition hace que adquiramos comportamientos compatibles con los que se espera de la vestimenta que llevamos y este mecanismo podría estar detrás las máscaras. Un aspecto interesante es que, no sólo las personas que muestran la máscara se comportan de una manera determinada, sino que el resto de personas también se comportan como se espera comportase delante de alguien que la porta, ya que si no, no existiría autoridad.

Como ejemplos de máscaras tenemos los DNIs y pasaportes como ciudadanos de un país, las circuncisiones como miembros de ciertas religiones, uniformes como miembros de cierta profesión, batas de hospital o laboratorio, etc. 

Como hemos visto también durante las diferentes categorías, una misma señal puede tener varias tipologías diferentes. Una cruz o una medalla de la virgen puede ser un ángel y un emblema. Daos cuenta que no es una máscara porque normalmente ni elimina personalidad ni implica autoridad ni tabús. En el caso de la religión cristiana, una máscara podría ser un alzacuellos. 

De momento lo he intentado reducir a 10 categorías. Llevo unas semanas observando y catalogando todo tipo de señales y hasta el momento no he necesitado ninguna más adicional. De todas formas, no descarto con el tiempo ampliar este mismo artículo e ir perfeccionando o ampliando esta clasificación.   

Así con estas categorías ya tenemos un elemento más para estudiar las señales. Entre las que ya hemos nombrado en otros artículos podemos recapitular:

  • Qué se señala
  • A quién se señala
  • Contra quien (en caso de ser una señal de atención discriminativa)
  • Cómo se señala
  • Qué cantidad de recursos se utilizan para 
  • Tipo de señal (las que acabamos de ver)

Las actualizaciones las haré en este mismo artículo. 

viernes, 17 de agosto de 2012

Rituales de maternidad y nacimiento en la Turquía moderna su evolución reciente

Como he comentado ya varias veces, voy a ser papá en unos días. Esto ha propiciado que la madre de mi mujer ("anne" para los de casa) esté por aquí durante un tiempo, así que he aprovechado la ocasión para, ya que tengo 2 indígenas turcas en casa (pronto habrá 2 y media), preparar un pequeño monográfico sobre ritos de paso en Turquía relacionados con la maternidad y el nacimiento. Los ritos de paso que nombro aquí son el resultado de varias entrevistas y largas conversaciones con anne, mi mujer y lo que han hecho familiares, amigos y conocidos de Turquía en los últimos años (mi familia no es tradicional, pero si que hemos tirado de la experiencia de vecinos, familiares, amigos, etc.).

Para hacer este pequeño monográfico voy a utilizar la misma nomenclatura, estructura y categorías que Van Gennep en "Ritos de paso". A su vez, voy a analizar todos los rituales actuales y luego haré algunas observaciones sobre la evolución de los nuevos rituales y los tradicionales. Para distinguirlos marcaré los nuevos con (N).

También voy a separar los ritos por persona y por transiciones. Por una parte estarán los de la madre, que pasará de ser una "mujer" a una "madre", pasando por el estado liminar de "embarazada", y por otro está el bebé, que pasará de ser un recién nacido a un nuevo miembro de la comunidad y de la familia.

Comenzamos con los ritos de la madre. Cuando una mujer pasa a estar embarazada, está en un estado transitorio entre mujer y madre, y como estado transitorio tiene una serie de tabús y costumbres que debe de respetar tanto ella como el resto de la comunidad.

  • No podrá cortarse el pelo, ya que se  cree que al cortarlo "acorta" también la vida del bebé. Esto también se puede interpretar como una separación de su vida anterior como mujer, donde cortarse el pelo es un acto social y que aumenta la belleza y autoestima como mujer. 
  • No puede ver monos (no se la va a llevar al zoo, por ejemplo o se le va a decir que no mire cuando aparece uno en la tv, etc.), ya que se cree que el bebé podrá parecerse al animal que ve. Esto es muy interesante porque lo he visto en mi propia casa mientras preparaba las imágenes de los homínidos de otros posts. Mi mujer era incapaz de mirarlos. Esto entraría en un rito de contagio directo según las categorías de Van Gennep. 
  • Tampoco puede mostrar la barriga a miembros mayores de su familia (abuelos, tíos, padre, etc.) por pudor (ayip). Esto es también un acto de separación con su vida anterior donde podía mostrar su cuerpo (vestido, claro) a sus familiares sin avergonzarse.
  • También se le colocarán "nazar boncuk" o amuletos contra el mal de ojo. Estos amuletos tiene la propiedad de desviar el mal de ojo hacia ellos y caerse o romperse en lugar de la persona que los lleva puestos. Esta es una tradición compartida con Grecia, Armenia, Azerbayán y otros países del entorno. 
  • Además, cuando se ve a una mujer embarazada por la calle se debe decir "Allah kurtarsin" que se traduce como "Que Dios te cuide". 
Una vez que se da a luz, se pasa a los ritos de reagrupación dentro de la comunidad de la madre
  • Justo después del parto, la mujer utiliza su sudor para lavarse la cara con el fin de eliminar cuanto antes el melasma o máscara del embarazo. El melasma es una pigmentación de la piel que no se elimina por mucho que se lave, así que consideraré esto también un rito de eliminación de su estatus de embarazada y su paso a estado de madre.
  • Los familiares llevan medallas de oro (Cumhuriyet altini). Cada una tiene un precio que luego puede ir a cambiarse por su valor de nuevo por dinero. Los familiares más cercanos llevan las medallas más grandes y el valor será proporcional a la cercanía y al poder adquisitivo del familiar. 
  • (N) La entrega de las medallas de oro se realiza en casa o en el propio hospital. Normalmente las medallas se ponen en el vestido de la madre. Sin embargo, en la actualidad hay familias que en ponen un cojín o almohada donde se ponen las medallas. Esto es una muestra de riqueza, ya que lo que se da a entender es que vas a recibir tantas medallas que va a ser tan incómodo de poner a la madre que prefieres poner un sustituto de ella (una proyección) y colgarlo allí.
  • La abuela materna prepara un sorbete llamado Lohusa Serbeti (os dejo aquí la receta en inglés) para las visitas que vienen a casa a conocer al recién nacido y a ver a la madre. La madre también debe beber este sorbete. 
Fuente de la imagen y receta aquí.
  • (N) Además de esto, también se  ha importado una costumbre estadounidense llamada baby shower en la que se invita a los familiares y amigos a casa, se compran tartas y se les invita a comer. Los invitados traen los regalos para la madre y para el bebé. Esto se puede hacer antes o después del parto.
  • (N) Durante las visitas en el hospital o en casa, se da como recuerdo un detalle del nacimiento de bebé. 
  • (N) Hay familias que programan el parto en hospitales privados y al saber la fecha preparan también invitaciones similares a las de la boda para que la gente pueda visitarles en el hospital. 
El paso de embarazada a madre tiene su propio periodo liminar en sí mismo, ya que no es inmediato la salida del embarazo a la vida de nuevo en la comunidad:
  •  La madre durante 40 días no podrá salir de casa ni hacer ninguna tarea. Los vecinos ayudarán con comida para que no cocine y habrá alguien de la familia siempre en casa con la nueva madre. 
  • Se pondrán cintas rojas o una escoba detrás de la puerta de la habitación donde esté la madre para evitar el "Al Basmasi", que produce depresión, miedo y pesadillas a la madre.
  • A los 40 días la madre puede salir a la calle con su hijo, lo que se convierte, con el paso físico por la puerta de su casa (ya hablamos de puertas y portales en otro artículo y su importancia en los rituales de paso), en la finalización de la fase liminar y su vuelta a la sociedad.
Para el bebé también hay rituales de paso, que lo convierten de ser un recién nacido a un miembro más de la familia:
  • Antes de que nazca el bebé no debe moverse la cuna en la que va a ser puesto, lo que constituiría un tabú del estado liminar dentro del útero materno que se rompería al nacer. 
  • (N) Desde hace unos años se ha puesto de moda contratar un fotógrafo privado (como este) para que haga un reportaje fotográfico profesional durante el parto. Esto sería similar al uso de fotógrafo en las bodas en España (también un rito de paso). No sé si ponerlo en la madre o en el niño. De momento lo dejo aquí, aunque está abierto a discusión. 
  • (N) Los hospitales dan ahora un certificado de nacimiento con la hora, día, kilos al nacer, una huella del pie, etc. como recuerdo. Esto es nuevo también y es un documento sin ningún caracter legal, sólo lúdico. 
  • Se le pone en el hombro un nazar boncuk contra el mal de ojo detrás del hombro. Antes eran sólo la imajen de un ojo azul, pero ahora han evolucionado y algunos ponen "Masallah", otros ponen Allah en árabe, otros ponen otras formas de buena suerte, como mariquitas, etc.  
Nazar Boncuk. Fuente wikipedia.
  • El miembro masculino más anciano y/o más prominente de la familia (el jefe del grupo familiar extenso), puede ser el abuelo, un tío, etc. debe decir en turco 3 veces al oído del bebé: "Tu nombre es (y el nombre del bebé)". A partir de ese momento, se considera que el bebé ya tiene un nombre. Esta ceremonia se denomina Ilk Adi.
  • (N) A los 15 días lo visten con de celebración e invitan a los familiares y conocidos cercanos a casa para rezar. Este es un nuevo rito de agregación con componentes religiosos que antes no existían o no estaban extendidos en Turquía. 
  • Cuando se cae el cordón hay varias opciones. Una es guardarlo. Otra es tirarlo al tejado. Esta costumbre se hace con otras partes del cuerpo que se caen, como dientes. Su cometido es que nadie pueda cogerlo, ya que al ser una parte del cuerpo podrían ser profanadas. Otra costumbre consiste en llevar o enterrar el cordón donde se quiere que el niño vaya cuando sea mayor. Hay quien lo tira en el campus de una universidad, hay quien lo manda a Europa... Esto constituiría un rito simpático animista indirecto según Van Gennep. 
  • Durante los 40 días que la madre no sale de casa, el niño se queda con ella. Cuando terminan los 40 días, se lava públicamente al bebé por primera vez. Para ello, se mete todo el oro, joyas y metal en la bañera y se lava al bebé mientras se reza. Después se le viste bien y sale a la calle junto a la madre. Esto sería un rito de purificación antes de cruzar el umbral junto a la madre de vuelta a la sociedad. Sería similar al bautizo cristiano, en el que la purificación con agua marca el fin del periodo marginal y comienza la agregación dentro de la comunidad. 
  • Cuando le sale el primer diente de hace una nueva ceremonia: dis bulguru en la que se invita a la mujeres de la familia y amigas (mujeres porque se hace durante el día y los hombres están trabajando) y se las invita a comer. En esta ceremonia se le ponen al niño varios objetos para que elija entre ellos (un espejo, medicinas, una pelota de fútbol, un boli, etc.). El objeto que elija sirve para predecir a qué se va a dedicar de mayor. Durante esta ceremonia también se traen regalos para el bebé. 
  • Cuando el niño dice sus primeras palabras se le pone delante de un espejo por primera vez. Antes no se hace. 
Hasta aquí la pequeña etnografía de los ritos de paso en la Turquía urbana referentes a la maternidad y al nacimiento. A partir de aquí me gustaría comentar también algunas cosas interesantes sobre los nuevos rituales. 

Como veis, en Turquía conviven los ritos tradicionales con los nuevos ritos. Algunos de ellos surgen por varios factores:
  • La aparición de una creciente clase social media y urbana con poder adquisitivo superior al que tenían generaciones anteriores, Estos son los nuevos ricos.
  • La alta jerarquización de las relaciones sociales en Turquía hace que cuanto más alto estés en la escala social, más puedas ganar, tanto material como socialmente. Esto hace que los esfuerzos para ser considerados de alto estatus ante miembros de la sociedad (amigos, vecinos, familiares, etc.) sean costosos y constantes, dando lugar a continuas comparaciones de demostraciones de poder económico y social (adornos, joyas, móviles, gente que te visita o te invita a eventos sociales, restaurantes a los que vas...). 
  • Turquía está viviendo un proceso de islamización progresiva (política), de forma que cada vez más personas cumplen con el  ramadán, con los ritos religiosos, etc. Y cumplirlos o no (o mostrar que los cumples o no) puede ser una condición implícita para acceder a ciertas posiciones de confianza, tanto en puestos institucionales como en la empresa privada. 
  • Las nuevas generaciones están cada vez más expuestas a la cultura occidental, sobre todo la americana, a través de la TV, programas de intercambio, programas de master en universidades americanas, etc. Además de la influencia europea que viene de Alemania.
  • Las redes sociales como Facebook están integradas totalmente con la sociedad urbana de Turquía. Estas constituyen un modo más de mostrar los lugares a los que has viajado, las ceremonias sociales en las que has participado, los restaurantes en los que has cenado, etc. Todo ello contribuye por una parte a mostrar poder económico y social y por otra, una oportunidad de escanear constantemente el propio grupo social para ver las actividades de los demás y poder posicionarlos conforme a estas escalas.   
Así, con estos factores, vemos como algunos rituales han evolucionado de forma que sirven para aumentar la posición social de la familia, tanto del núcleo familiar como la extendida. Por ejemplo, el cojín para colgar las medallas, las invitaciones para el hospital o el certificado de nacimiento (que se da sólo en clínicas privadas que no todo el mundo puede costearse). 

A su vez, vemos también como algunas costumbres aparecen con el componente religioso de fondo, como la reunión a los 15 días para rezar o añadir el nombre de dios en los nazar boncuk

Otras son principalmente para difundir por las redes sociales y que las vea todo el mundo, como el fotógrafo en el paritorio, las fotos del baby shower, etc. Como es lógico, otras personas del grupo social verán que esa persona lo ha hecho y querrán hacerlo también, incluso mejorarlo si piensan que su posición social es mayor que la persona en la que lo han visto. 

Este pequeño estudio es un buen ejemplo de como los nuevos factores como un proceso de islamización o las redes sociales pueden modificar algo tan esencial para una cultura como los rituales de paso de la maternidad y el parto.

PD: Muchas gracias de nuevo a mi mujer por su paciencia en las largas traducciones necesarias para este artículo (y más en su estado) y las correcciones :)