jueves, 10 de diciembre de 2009

La musica es inherente al ser humano

El otro día vi un vídeo en TED Talks acerca de la sincronización. Un vídeo muy interesante que viene a decir que todos los organismos vivos (y no tan vivos) tienden a sincronizarse.


Esto me hizo pensar en como, cuando escuchamos música automáticamente seguimos el ritmo con la cabeza, los pies, nos ponemos a bailar... ¿Por qué pasa esto?

La música es un elemento social. Hace siglos, cuando no había manera de grabar la música y volverla a reproducir, las canciones se transmitían de manera tradicional (quitando las partituras clásicas y eclesiásticas). La música formaba parte de las pequeñas sociedades rurales y cada pueblo tenía sus propias coplillas, canciones e incluso instrumentos. Esto definía de donde eras, a donde pertenecías. Al igual que a nivel social, la música también se ha utilizado para crear naciones mediante himnos, para unir ejércitos o para identificarse con ideales políticos.

Robert Johnson, an influential Delta blues mus...Image via Wikipedia

Con la llegada de la radio y los discos de vinilo llegó la primera diversificación musical. Desde los años 20 y 30 la música podía viajar, transportarse más allá de donde el músico podía llegar. Podíamos escuchar a Charlie Patton, Robert Jonhson y a Ray Charles incluso cuando ellos nunca llegaron a pisar mi ciudad ni vivir al mismo tiempo que yo. En ese momento la música pasó de ser una forma de identificación geográfica y local a una forma de identificación de estilos de vida. Cuando alguien escuchaba a Little Richard era porque le gustaba el Rock&Roll y lo que ello implicaba.

Photo of Ray Charles at Grammy Awards rehearsa...Image via Wikipedia


El siguiente paso vino con las cintas de cassette. En ese momento uno podía juntar en una misma cinta canciones de diferentes grupos y discos y crear su propia colección de música que le identificaba. Un poco de blues, un poco de new age, un poco de rock... La música entonces pasaba a una nueva dimensión de un plano social al personal. Además, se diversificó el conocimiento musical que la gente tenía. Pasamos de un Lennon y McCartney de 15 años corriendo de un lado a otro de Liverpool para que otro joven les enseñase a hacer un La 7º a jóvenes que tras conocerse lo primero que hacían era grabarse recopilaciones de música para ampliar su universo musical.

El siguiente paso es donde estamos ahora. La música ya no sólo una forma de identificación local, social, o personal. Ahora escuchamos para crear nuestro propio contenido. Ahora quizás es el momento de la historia en el que más contenidos se crean y distribuyen de manera totalmente gratuita y desinteresada. La gente ya no sólo escucha música para identificarse, sino para expresarse. Además, cada vez menos escuchamos la música impuesta por los medios y más exploramos a autores independientes con los que es más fácil identificarnos.

La música no va a desaparecer como muchos creen que va a pasar "por culpa de internet". Al contrario. Por culpa de internet, la música está más viva que nunca. Al haber más variedad y al identificarnos cada vez menos con los productos artificiales que se nos presentan, los artistas y los ciudadanos de a pie cada vez creamos por nosotros mismos más y más música y contenidos.

¿Cuál es el futuro de la música? Posiblemente dentro de unas décadas dejaremos de tener productos artificiales y las discográficas tendrás que invertir cada vez más tiempo y dinero en encontrar en la propia red a los mejores artistas, a aquellos que mejor conecten con la gente y, posiblemente, sin poder ofrecerles una vida de artista como ahora la conocemos y tener que ganarse el pan mediante conciertos en directo y actuaciones cada vez más interesantes y trabajadas.

Sinceramente, espero que llegue este nuevo modelo. Será bueno para la música, para la creatividad y para la cultura. La diversidad y el intercambio de ideas ha sido siempre positivo para la creación de nuevos materiales y contenidos, y el intercambio en internet de todo tipo de cultura es un hecho que no puede ni detenerse ni obviarse.


Mis TOP 10 extensiones de Chrome

Desde ayer Google Chrome permite el uso de extensiones. Desde entonces no he parado de personalizarme y probar las extensiones que hay disponibles. Entre ellas aquí están las que más me han gustado (que no quiere decir que sean las más imprescindibles).
  1. Google Mail Checker y Google Wave notifier. Sin comentarios.
  2. Brizzly. Lee y actualiza Facebook y Twitter directamente desde Chrome.
  3. Torrent Detector.
  4. Bit.ly. Acortador de direcciones y publicador.
  5. Detector y suscriptor de RSS
  6. Wolfram|alfa. Accede a este buscador semántico.
  7. Zemanta. Ayuda a la publicación de posts y emails.
  8. Megaupload DownloadHelper. Para no esperar.
  9. Timer. Para avisarte de esos "sólo 5 minutos".
  10. Aniweather. El tiempo de manera original.
Como ya he dicho, hay muchas más, pero estas son las que más me han llamado la atención.

lunes, 7 de diciembre de 2009

La Quinta Columna de Internet no existe

Hace unas semanas me interesé por el término "quinta columna" que escuché en una serie de televisión. Me hizo gracia que esta expresión naciese en España y se utilizase en estos momentos a nivel mundial para definir (según la wikipedia) "a un sector de la población, usualmente minoritario, que mantiene supuestas lealtades hacia algún país distinto a aquél donde residen, debido a motivos religiosos, ideológicos, o étnicos. Tal característica hace que la quinta columna sea vista como un conjunto de personas potencialmente desleales al país donde viven".

Viendo la reacción de algunos medios hacia el manifiesto y el apelativo de "los internautas" o "el lobby de internet" parece ser que para algunos la Quinta Columna de Internet es un hecho ya constatado y que dan por cierto.

Sin embargo hoy me he despertado por la mañana y he leído un artículo de @edans, "Políticos al borde de un ataque de nervios: el movimiento descentralizado". En él describe perfectamente el sentimiento que tenía al escuchar a toda esta gente hablar de "los internautas" como si fuésemos un movimiento organizado, politizado, con unos intereses concretos y económico-políticos.

Nada de hecho. La Quinta Columna de Internet no existe. Este es sólo el primero de muchos movimientos ciudadanos que antes eran impensables y de los que tenemos la suerte de poder vivir en directo, participar y ser parte de ellos. Estemos del lado en el que estemos.

Por fin existe una forma de poder ejercer la ciudadanía que no sea bajo la demanda directa y arbitraria de los referendums y la periodicidad de unas elecciones.

Si hay una Quinta Columna en todo este asunto no somos los ciudadanos (y no internautas como se nos llama) que defendemos el manifiesto.

viernes, 4 de diciembre de 2009

Sobre "el paseo" por el #manifiesto en Zaragoza

Acabo de volver de "darme un paseo" por la plaza de España en Zaragoza. Allí me he encontrado (casualmente, por supuesto) con otros como yo que apoyamos el Manifiesto en defensa de los derechos fundamentales en internet. Las sensaciones que me traigo son dispares.

Por un lado me ha decepcionado mucho ver que sólo había unas 30-40 personas allí reunidas. Es imposible que puedan tomar en serio las iniciativas online si luego no se materializan en personas físicas que SI que salen en las fotos de los periódicos.

Sin embargo, me ha parecido muy buena señal la heterogeneidad del grupo que nos hemos plantado allí. No eramos, ni mucho menos, un "grupo de frikis" como mucha gente hubiese esperado. También creo que ha sido un buen comienzo, ya que en vísperas de un puente y sólo 1 día de preparación hayamos estado más de 15 personas. Posiblemente la próxima vez seamos más y verán que detrás de cada perfil de facebook, cada blog y cada twitter hay una persona, que paga sus impuestos, vota y camina por nuestras ciudades. Un ciudadano.

Aquí os dejo una imagen de la concentración.

miércoles, 2 de diciembre de 2009

A propósito del manifiesto...

Hacía mucho que no escribía en este blog. El motivo es porque le he estado dedicando tiempo a otro proyecto, un blog de relatos cortos de ciencia ficción.

¿Quién es autor? ¿Quién es músico? Parece que sólo aquellos que viven de ello son "autores". Hace ya algún tiempo hablaba de la desprofesionalización de la cultura y creo que en estos momentos, con todo el revuelo que se está montando con la demonización y persecución (incluso política y saltándose el amparo judicial) está cada vez más presente.

Yo también soy autor, si por autor podemos llamar a alguien capaz de crear un contenido nuevo con cierto valor cultural. Yo mismo he creado el canal de distribución, las obras, la maquetación... es COPYLEFT. Todo aquel que quiera leerlo, está disponible en la web. No se cobra a nadie ni por leerlo ni por descargárselo. Este es el modelo de cultura que permite crear miles de contenidos de calidad (porque vienen de la motivación personal de las personas, y no de los intereses económicos de productoras y editoriales).

Este modelo me ha permitido a mi poder escribir y que mis "obras" las lea gente que de otra manera sería imposible. ¿Quién iba a publicar un libro de un escritor novel, desconocido y encima de un género que no sea novela histórica...? ¿Quién lo distribuiría? Y seamos sinceros, la aportación económica que recibiría sería exactamente la misma que escribiendo el blog: NADA.

Por supuesto que los que mejor lo hagan deberían tener la posibilidad de ganarse el privilegio de vivir de ello. Sin embargo, la burbuja del ocio es tan grande que la cantidad de dinero que mueve sin que realmente haya una demanda real hace que caiga por su propio peso.

La diferencia entre la burbuja del ocio y la del ladrillo es que el ladrillo no mueve masas y genera opinión, las personas del ocio si. Y cualquier partido político que esté en el poder les dará la razón, sea de un partido o de otro.

El propio sistema capitalista que promueve la industria del "ocio y la cultura" se ha vuelto en su contra. Si no hay demanda, la solución es echar la persiana e irse a la calle a buscar algo que sí que la tenga, pero en contra del capitalismo que ellos mismos promueven pretenden adaptar el mercado y las leyes a su modelo de negocio, cuando debería ser al contrario.

Por un lado me da rabia que sucedan estas cosas y que haya gente que trate de imponer sus intereses económicos a los derechos fundamentales de los ciudadanos. Sin embargo, es bueno que estas cosas pasen de vez en cuando. De no ser por estas subidas de noto y encabritamientos infantiles de "los autores" aún estaríamos bajando cosas con Napster, y posiblemente no se hubiesen desarrollado otros protocolos p2p.

Venid a por nosotros, porque estamos preparados. La tecnología está muy por delante de las arcaicas mentes de aquellos que se oponen a ella. Esto no servirá sino para mejorar la privacidad de las redes p2p y el desarrollo de nuevos protocolos distribuidos. ¿Será esto el salto tecnológico hacia la NUBE, donde todo está en todas partes y en ninguna a la vez?

Manifiesto en defensa de los derechos fundamentales en internet

Ante la inclusión en el Anteproyecto de Ley de Economía sostenible de modificaciones legislativas que afectan al libre ejercicio de las libertades de expresión, información y el derecho de acceso a la cultura a través de Internet, los periodistas, bloggers, usuarios, profesionales y creadores de internet manifestamos nuestra firme oposición al proyecto, y declaramos que...

1.- Los derechos de autor no pueden situarse por encima de los derechos fundamentales de los ciudadanos, como el derecho a la privacidad, a la seguridad, a la presunción de inocencia, a la tutela judicial efectiva y a la libertad de expresión.

2.- La suspensión de derechos fundamentales es y debe seguir siendo competencia exclusiva del poder judicial. Ni un cierre sin sentencia. Este anteproyecto, en contra de lo establecido en el artículo 20.5 de la Constitución, pone en manos de un órgano no judicial -un organismo dependiente del ministerio de Cultura-, la potestad de impedir a los ciudadanos españoles el acceso a cualquier página web.

3.- La nueva legislación creará inseguridad jurídica en todo el sector tecnológico español, perjudicando uno de los pocos campos de desarrollo y futuro de nuestra economía, entorpeciendo la creación de empresas, introduciendo trabas a la libre competencia y ralentizando su proyección internacional.

4.- La nueva legislación propuesta amenaza a los nuevos creadores y entorpece la creación cultural. Con Internet y los sucesivos avances tecnológicos se ha democratizado extraordinariamente la creación y emisión de contenidos de todo tipo, que ya no provienen prevalentemente de las industrias culturales tradicionales, sino de multitud de fuentes diferentes.

5.- Los autores, como todos los trabajadores, tienen derecho a vivir de su trabajo con nuevas ideas creativas, modelos de negocio y actividades asociadas a sus creaciones. Intentar sostener con cambios legislativos a una industria obsoleta que no sabe adaptarse a este nuevo entorno no es ni justo ni realista. Si su modelo de negocio se basaba en el control de las copias de las obras y en Internet no es posible sin vulnerar derechos fundamentales, deberían buscar otro modelo.

6.- Consideramos que las industrias culturales necesitan para sobrevivir alternativas modernas, eficaces, creíbles y asequibles y que se adecuen a los nuevos usos sociales, en lugar de limitaciones tan desproporcionadas como ineficaces para el fin que dicen perseguir.

7.- Internet debe funcionar de forma libre y sin interferencias políticas auspiciadas por sectores que pretenden perpetuar obsoletos modelos de negocio e imposibilitar que el saber humano siga siendo libre.

8.- Exigimos que el Gobierno garantice por ley la neutralidad de la Red en España, ante cualquier presión que pueda producirse, como marco para el desarrollo de una economía sostenible y realista de cara al futuro.

9.- Proponemos una verdadera reforma del derecho de propiedad intelectual orientada a su fin: devolver a la sociedad el conocimiento, promover el dominio público y limitar los abusos de las entidades gestoras.

10.- En democracia las leyes y sus modificaciones deben aprobarse tras el oportuno debate público y habiendo consultado previamente a todas las partes implicadas. No es de recibo que se realicen cambios legislativos que afectan a derechos fundamentales en una ley no orgánica y que versa sobre otra materia.